Tecnología

Sentey Phoenix

Un nuevo jugador en la arena gamer.

Cuando mencionamos el nombre Sentey, lo primero que nos viene a la mente son sus gabinetes o fuentes de poder. Pero lo que no sabemos es que tienen un catálogo extenso de productos apuntando al público entusiasta. Probamos un teclado de entrada de gama muy interesante.

¿Qué se le puede pedir a un teclado gamer? Además de ser bonito. Comodidad, funcionalidad y opciones. La versión Phoenix de Sentey incluye muchas de estas características aunque no todas, aunque por el precio que tiene pedir más sería un abuso.

La elegante caja en la que viene incluye un montón de panfletos, un lindo colgante que reza “no ahora, estoy jugando”, guías, calcomanías, una tarjeta VIP y el CD con los drivers. También agradecemos que incluya un plástico protector para la punta dorada de la entrada USB, así estamos seguros que nunca le va a pasar nada si lo llevamos de acá para allá amén que el cable está mallado para darle más resistencia mecánica. Finalmente un detalle más que agradable es la funda de tela que nos permite transportar el teclado de manera más cómoda y limpia.

Se trata de un teclado no mecánico (es de membrana tipo Silica Gel aunque Sentey garantiza 50 millones de presiones como los teclados mecánicos) con una fuerza de actuación de 50gr similar a un switch Cherry MX Red y teclas regulares en altura. Es bastante cómodo para escribir. A la hora de jugar sigue manteniendo esa comodidad.

También vienen unas teclas naranja flúo para cambiar el clásico combo WASD, las mismas no tienen textura sino que simplemente recurren al impacto de color para que tengamos una referencia más rápida de la mano.

Como bien dijimos, el diseño es excelente. No es demasiado grande, es atractivo y todas las teclas están retro iluminadas en color Azul con 3 ajustes de intensidad (bajo, alto y parpadeo), que lo hace aún más atractivo. Algunos teclados te dan la posibilidad de cambiar el color del LED

Junto con el teclado notamos 2 “alas” a los costados que son ni más ni menos que teclas de Macro. En la izquierda tenemos 5 teclas (M1 a M5) mientras que en la derecha tenemos M6 y M7, una tecla de cambio de perfil (se soporta 3 perfiles) lo que expande nuestra opción de macros a 21 combinaciones en el teclado que tiene una memoria interna de 128K para almacenar las macros, la tecla de ajuste de iluminación y la función de bloqueo de tecla Windows para cuando estamos en el fragor de la batalla.

Esta versión del teclado también incluye capacidades anti-ghosting, lo que te garantiza la posibilidad de apretar hasta 8 teclas en simultáneo y que tome todos los comandos. Probablemente te preguntes cuándo vas a necesitar apretar 8 teclas al mismo tiempo, no sabemos, pero el hecho de que puedas apretar cuatro sin que Windows se vuelva loco es excelente.

Junto con el teclado, viene el software propietario de Sentey desarrollado para el Phoenix que nos permite grabar las macros de manera más rápida y almacenar todas las macros que queramos, incluso vincularlas a un juego en particular, entonces cuando iniciamos el juego, el software se encarga de transferir las macros a la memoria interna del teclado para tenerlas disponibles, con lo cual el potencial de macros que podemos tener en el Phoenix es infinito. El único tema es que el software es ligeramente confuso y me costó bastante configurar las macros de manera correcta.

Nos pusimos a probar el Phoenix durante una semana en un uso diario de tecleo y algo de gaming. Como teclado me parece que tiene el tamaño apropiado y es liviano al ser íntegramente de plástico, aunque eso también genera que si presionamos en el centro el teclado se doble un poco.

En el uso diario para escribir, me quedó un sabor de “gusto a poco” porque no logré acostumbrarme por completo al teclado, en defensa del Phoenix cabe aclarar que mi teclado diario es un mecánico con switches Cherry MX Black y estoy acostumbrado a él en demasía. En el gaming la cosa cambió para mejor en parte por la asistencia de las tecla de Macro, cualquier jugador de MMORPG va a apreciar tener una macro compleja a un botón de distancia.

La pregunta del millón viene por la relación precio/rendimiento. La respuesta es que por unos 750 pesos podemos hacernos de este bello muchacho, lo cual es menos de la mitad de un teclado mecánico y bastante más económico que varios teclados de membrana orientado al público gamer. O sea que por un monto razonable nos llevamos un teclado lindo, retro iluminado (ideal para jugar de noche a oscuras), con teclas de macro y una estética pulida. Si lo ponemos en la balanza, la medalla [IRROMPIBLES] de Bronce está bien merecida [i]

Nota: Agradecemos a Fernando Cerimedo de Sentey por cedernos el teclado para esta review.

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