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[REVIEW] HyperX Alloy FPS

hyper alloy fps

Tarde pero seguro, Kingston se anima con los teclados gamer

Quieren un teclado sólido. Quieren un teclado con luz. Quieren que sea mecánico. Quieren que sea resistente, y sólido. Quieren un teclado inmortal y para toda la vida. Quieren también que sea fachero. Quieren que los cables no se enreden. Quieren llevárselo en un estuche canchero, porque es su teclado de la suerte cuando juegan. Quieren poder cerrar los ojos y al tacto saber cuáles son las teclas para jugar. Si quieren todo eso en un solo teclado, definitivamente lo que buscan es un Alloy FPS de HyperX.

El inception de HyperX

HyperX es la marca de Kingston para la línea gamer. El gigante que se mete a paso lento y firme en un mercado en el que creíamos que ya estaban las cartas echadas.
Arrancaron con su especialidad, memorias y discos. Después se animaron a los periféricos desembarcando con su sólida línea de auriculares Cloud, y ahora prueban suerte con su primer teclado para Gaming, HyperX Alloy FPS. ¿Podrá continuar HyperX con esta seguidilla de hits para el mercado más consumista y exigente? Vamos a tratar de responder esa pregunta, como diría Mostaza Merlo, “paso a paso”.

La caja de la alegría

HyperX Alloy FPS ya nos invita a probarlo desde la caja. Para quienes entendemos un poco de producción gráfica e impresión, la caja es de lo más canchera y aspiracional. Vemos esa caja y presentimos que lo que está adentro es costoso y de calidad. La abrimos, y esa sensación se multiplica. Lo primero que se ve es una práctica funda para transportar el teclado, con un bolsillo. Sabemos que ellos hoy en día apuntan a un mercado de gaming competitivo y también sabemos lo mucho que se acostumbran sus usuarios a la presión de las teclas o la respuesta de su mouse. Por eso HyperX ofrece, ya desde la caja, su propia funda, para cuidar y proteger el teclado que tan importante es para ese gamer que compite.

https://www.youtube.com/watch?v=iuQOi-d7RBQ

Debajo de esa funda, y hundido cuidadosamente en la espuma de la caja, nos espera el teclado. A simple vista es sobrio, sin curvas ni firuletes en el diseño. Pero mirándolo con cuidado notamos que tiene todo lo que festejamos en un teclado. No tiene accesorios innecesarios, y está perfectamente comprimido para tener todas las teclas y el espacio entre las mismas, muy bien optimizado. Mide sólo 44×13 cm, casi no tiene marco y al escribir, nuestros dedos llegan hasta el borde. No es aparatoso ni pesado, convirtiéndolo en una excelente elección si tenemos un escritorio con poco espacio.

Las teclas son cómodas al tacto y el sistema de interruptores que utiliza (Cherry MX Blue) promete la guarrada de 50 millones de presiones, convirtiéndolo en un Highlander de los teclados y capaz de soportar cualquier golpiza propinada por un gamer. Acostumbrado a los teclados regulares, Alloy FPS transmite una ruidosa pero placentera sensación de solidez al escribir o jugar. ¿Tanto ruido hacen las teclas? Y sí, pero cuánto amor.

hyperx alloy fps 2

El teclado viene, además, con una ranura USB para cargar dispositivos móviles. El cable es mallado y desmontable. Si lo transportamos, se acabó eso de enroscar el cable prolijamente para que no se rompa nada. Se desenchufa, se guarda sin problemas en el bolsillito de la funda y buenas noches.

Las teclas son sólidas y suaves al tacto con un adicional brillante y astuto. En una bolsita viene una pinza y 8 teclas para que reemplacemos las se usan para FPS por otras de color rojo. Podemos intercambiar del 1 al 4 y también la W, S, A y D que vienen además con una textura simil acero. De esta manera, las teclas que más usamos (si jugamos First Person Shooters) se destacan visualmente y al tacto.

https://www.youtube.com/watch?v=OMoUTPrBnOg

El boliche y sus funciones

Pero no termina acá toda la maravilla de Alloy FPS. El teclado es retroiluminado. Tiene 6 funciones distintas para luz (fija, respira, se mueve en forma de ola, apagado y se prenden las teclas que presionamos, hace efecto de gota de agua al presionar las teclas o sólo enciende las de gaming). Es una pena que la luz sea solo de color rojo, el único punto que podría ser “mejorable” con la inclusión de un hermoso RGB.

HyperX Alloy FPS tiene además Anti-Ghosting, teclas multimedia y la posibilidad de desactivar la tecla Windows para evitar salidas accidentales al desktop en el fragor de la batalla.

hyperx alloy fps 1

¿Vale la pena la inversión?

Vamos a lo que más duele. Alloy FPS no es barato. Cuesta $2199, que es bastante para nuestros castigados bolsillos. Pero HyperX sabe devolver todo esto con creces si uno decide invertir. Aprovecha perfectamente cada centímetro, es mecánico, tiene un marco sólido de acero pero solo pesa 1kg, tiene luz, teclas extra, funda canchera, puerto de carga y la promesa de soportar años de castigo.

Está claro que HyperX vino para quedarse y para intentar serrucharle el piso a la competencia. Lentamente, pero con paso firme, avanzan ganándose el corazón de los gamers. Porque del corazón al bolsillo, hay solo unos centímetros.

Nota: Agradecemos a Soledad García Pierini y Ariel Plabnik por cedernos el teclado para realizar este review.

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