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Debido a la falta de ideas y que el salpicón nunca viene mal (sobre todo si no tenemos ni la voluntad ni nadie que nos quiera cocinar o menos aún queremos entrar a la depresión de tomar sopitas Marruchan), haremos un refrito, ultra random que total, el tiempo no se pierde, en todo caso se malgasta.

Habiendo hecho la aclaración pertinente, pasamos a esta, la primera columna de la segunda mitad de este año que pasa, y posiblemente no quiera volver más.

 

a) Que últimamente no tengo nada de qué quejarme en la vida y me estoy  sintiendo vacío y sin rumbo te juro.

 

b) Que igual, de todas formas, nunca faltan los individuos que se dan autolike a sus autofotos como para hacer que me olvide del punto anterior

 

c) Que Bolivia es el único país en el que el discurso de la oposición es “hay escasez de papel higiénico”. Lógico, con tanta c@g#d@ que se habla…

 

d) Que si no te gusta el chocolate Toblerone es como que todo está mal con tu vida y no quiero que seas mi amigo.

 

e) Que lo mismo se aplica para Piazzolla, los Beatles y Bob Dylan

 

f) Que hay gente que si está viva es porque es re bajón que descubran que asesinaste a alguien y todavía no vi la cantidad suficiente de capítulos de CSI como para perpetrar el crimen perfecto

 

g) Que sí, llegan Les Luthiers a Bolivia, pero los precios son una broma pesada hecha por los organizadores

 

h) Que ando con ganas de recuperar estas ideas viejas, pero aún realizables:

 

-Un hombre empieza a soñar que su saicera favorita lo quiere envenenar en su próximo chaqui, por lo que decide convertirse al judaísmo y comer solo Kosher. Conoce a una chica evangelista que le da un vuelco al corazón y entra en grandes aprietos espirituales. Muere el día que decide convertirse al evangelismo a causa de una embolia por comida kosher en mal estado. (Idea para una moraleja Esopeana)

 

-Un estudiante de la Universidad de Palermo (O cualquier otra institución del saver con v corta) espera pacientemente en la plazuela a la llegada del colectivo K y en su aburrimiento decide invocar a la Muerte a quien le juega unos partiditos de Winning Eleven. Tras haber ganado 5 partidos seguidos, sale del lugar dejando a La Muerte con una cuenta de 45 mangos por las gaseosas que se tomaron. La Muerte no tiene cambio, y tampoco la dueña del local que no entiende que se trata del Ángel de la Muerte y no me vengas con pavadas a mi me pagás con cambio. En el mundo la gente deja de morir (Un pequeño estudio con la finalidad de entender la capacidad humana de no contar con la atadura de la muerte)

 

-Agatha (vidente, psíquica, ato al amor que tu elijas, magia negra blanca y de mi pequeño pony) se da cuenta de lo ilusa que resulta su concepción del ser tras leer Kierkegard durante dos días seguidos debido a tener una pierna rota. Se transforma en una poeta itinerante cantando canciones de Camila para pasar el tiempo. Muere atropellada por un camión de La Serenísima (la calidaaaad (?)) que tenía que hacer una entrega de crema de leche (Idea para una novela corta cargada de simbolismo y pretensiones, ostensiones y esfuerzos cortantes)

i) Que en realidad sólo quiero actuar en Star Wars. Sí, hasta en la trilogía que se viene

Habiendo concluído esta verborragia de ideas que posiblemente nada cambie, recuerdoles que nada importa todo, porque todo importa nada.

 

Bueno, excepto el helado de dulce de leche granizado, pero eso da para otra columna enteramente diferente.

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