Black & White (2001)
El primer proyecto de la compañía marcaría a las claras el patrón de sus desarrollos: Proyectos muy ambiciosos, con excelentes ideas, una personalidad muy particular, pero que al final de cuentas terminaba quedando corto de la idea original. Tomando todo lo aprendido en el desarrollo de Populous, Peter Molyneux buscó crear el God Game definitivo, que ofreciera tanta complejidad y opciones que no hubiera nada que se le pareciera. Y en este último aspecto, lo logró. En ese momento no había absolutamente nada como Black & White. ¡Hasta hoy podríamos decir que no lo hay!
No solo teníamos poder de decisión sobre los pequeños habitantes de nuestra aldea, que nos ofrecían tributos y nos adoraban, sino que teníamos a disposición nuestra propia mascota. Una enorme criatura que debíamos criar y enseñarle cosas, con la cual eventualmente podíamos pelear nuestras batallas contra otros dioses y conquistar nuevos mundos.
Otro de los elementos casi por Black & White y se convertiría en un rasgo caracteristicos de sus proyectos era la posibilidad de elegir un “lado” acorde a nuestras acciones y decisiones, ya sea Bueno o Malo. Esto fue algo que Molyneux siempre puso como prioridad en sus juegos, aunque luego esa visión monotematica de la moralidad sería muy criticada.
Y aunque cuando salió, Black & White recibió críticas espectaculares de todos lados, pocos años después, muchos medios relevantes lo marcaron como uno de los juegos más sobrevaluados de la historia. Esto se debe principalmente a que, cuando salió, era realmente impresionante y ambicioso, pero su ejecución no estaba a la altura. Un tema que perseguría a Lionheado y Molyneux a lo largo de su historia.