Los jardines del recuerdo
“El laberinto del sueño, donde se pierden los demonios de la memoria”. Mientras disfrutamos de este breve pero hermoso juego, no deja de sonar en nuestras cabezas estas estrofas de los Héroes del Silencio. Y esto es porque, en circunstancias que no quedan claras, dos niños –Arina y Fredt– son transportados a un mundo de ensueño. Un mundo compuesto por islas salpicadas en el océano, donde cada una de ellas está ambientada con agigantados elementos tomados de recuerdos en común.
Sillones donde juegan videojuegos, viejos VHS y hasta las herramientas usadas para construir su casita del árbol, son decorado y elementos activos de puzzles al mismo tiempo. Cada isla representa un momento único, un momento de felicidad. Y es que The Gardens Between gira en torno a los recuerdos imborrables de la amistad. ¿Nuestra función? Ayudarlos a hacer indelebles estos momentos, plasmándolos en el firmamento de este mundo de ensueño.
Lo más pequeño es un misterio y lo sagrado tan sencillo
Cada una de las islas que mencionamos es en sí misma un puzzle que juega con la perspectiva 3D, donde no tenemos dominio directo sobre lo que ocurre. Tanto es así que ni siquiera, a excepción de acciones de activación, controlamos el movimiento de nuestros protagonistas. Lo que hacemos es manejar el flujo del tiempo, hacia adelante o hacia atrás.
De esta manera, le damos “Play” al mundo, mientras observamos con mucha atención lo que ocurre en el escenario hasta llegar al primer obstáculo. En ese tramo de seguro se halla escondida alguna pista necesaria para superarlo. A veces, se trata de un elemento que tiene una conducta atípica. Otras, el indicio se da observando la gestualidad de nuestros protagonistas.
Por lo general, la clave para superar cada obstáculo pasa por identificar aquellos objetos cuyo estado está desligado del parámetro del tiempo. Así, al modificarlos, rebobinar y volver a avanzar, los acontecimientos cambian y podemos continuar con nuestra procesión.
Ya mencionamos que no tenemos control directo sobre nuestros amigos, excepto sobre las acciones que activan elementos del puzzle. Además, cada personaje se relaciona con el entorno de manera diferente: Fredt es el único que activa interruptores, mientras que Arina porta una lámpara que puede albergar una luz mágica.
Dicho artefacto, además de poder generar puentes o limpiar nieblas impenetrables, es necesario para completar cada nivel. Debe ser depositado encendido en un altar que siempre está al final del recorrido. Esta ofrenda detona una breve evocación del recuerdo que compone la isla y convierte el momento en una constelación, fijandola para siempre en el cielo nocturno. ¿O tal vez sus memorias?
El corazón pasando un túnel, oscuro como un naufragio
Con lo expuesto hasta aquí, quizás esté de más contarles que The Gardens Between es un juego bello y emotivo. Aún cuando no existe una narración formal de los hechos, los gestos de nuestros protagonistas nos transmiten la importancia de cada evocación, de cada recuerdo. Junto con el diseño de puzzles, ese es el mejor punto del juego. La historia se contruye sin decir una palabra y, sin embargo, habla de la amistad, de los momentos felices de la niñez que se generan a través de ella y de la importancia de fijarlos en nuestra memoria.
De seguro han escuchado eso de que “nunca volveremos a ser tan dichosos como cuando fuimos niños”. Puede que no sea cierto, pero sin dudas cada uno atesora esas pequeñas hazañas, que se fijan para siempre en nuestros recuerdos felices. Lo que The gardens Between transforma en juego es, ni más ni menos, eso. [i]
DESARROLLADO Y DISTRIBUIDO POR: The Voxel Agents
GÉNERO: Puzzles
DISPONIBLE EN: PS4, Nintendo Switch, PC, Mac, Linux
CALIFICACIÓN
80%
QUÉ ONDA: Un fichín de puzzles que juega con el control del tiempo y la perspectiva.
LO BUENO: Imagen y sonido refuerzan las sensaciones que transmite el juego. Una narrativa que se las arregla para emocionar sin decir una palabra. Buenos puzzles cuya resolución depende de acciones indirectas y una atención aguda a los detalles.
LO MALO: Es un juego que se pasa de una sentada.
Este análisis fue realizado a través de un código de Nintendo Switch provisto por sus desarrolladores.
¡Atención, micos! Si les despertó la curiosidad, pueden comprar este fichín en la Humble Store haciendo [TIKI] acá.
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Gustavo Sobrero, alias El Cenizas, es Jefe de Redacción de [IRROMPIBLES]. Fue criado por una comunidad de flamencos con aspiraciones teatrales, de quienes heredó el talento para posar dramáticamente en cualquier foto grupal. Pasó su juventud investigando si los peces tienen acento regional al hacer “blub”. Está absolutamente convencido de que nadie lee esta información en los perfiles (planea demostrarlo con este texto). Pueden seguirlo en Twitter (@ElCenizasWTF) y en Instagram (@el_cenizas).