Te quedás helado
Los témpanos tienen la mala costumbre de impedir que la gente salga a flote. El explorador distraído se va quedando sin oxígeno y patalea pa’ arriba y zas, cabezazo a un bloque de hielo. Muerte y respawneo en la cápsula de supervivencia.
El paisaje blanco se extiende hasta el horizonte, a veces oscurecido por la tormenta, otras atravesado por los relámpagos. Las montañas son como dientes de hielo y las ráfagas de nieve azotan la base científica. Fresquito pa’ chomba.
Así es el nuevo escenario donde da comienzo Below Zero. Es la región antártica del mismo planeta y la historia ocurre un año más tarde de la que vimos en el primer Subnautica (enero de 2018).
De nuevo, aquí habrá un accidente, en este caso en los primeros minutos de juego, en los que todo parecía estar más o menos bien. De la elegante y cómoda base científica terminaremos (¡doh!) flotando solos en el mar helado, en una pequeña cápsula de emergencia, con lo mínimo para no morirnos de hipotermia.
El único camino es hacia abajo
En esta oportunidad, tomamos el rol de una investigadora (Robin Goodall, 37, xenolingüista) que debe sobrevivir por su cuenta mientras llegan refuerzos. Hay una «Estación Cero» a baja altura, visible entre los nubarrones y muy farolera en las noches, desde la que llegan cápsulas con herramientas e indicaciones, pero se trata de bucear, pescar y recoger minerales para convertirlos en recursos que nos permiten ir más lejos y más profundo, hacia una historia que pinta tan buena como la del Subnautica original.
Below Zero es una expansión stand-alone; es decir, se instala sin necesidad de tener el título anterior. Al momento de escribir esta nota, está en Early Access. Ya tiene buena parte del contenido del primer capítulo, aunque los monigotes de Unknown Worlds dicen que todavía le falta muchísimo, que no tiene las voces finales y que está todo repleto de bugs.
Probando este Early Access no vimos nada que pareciera provisorio (tal vez algunos detalles menores, la música es la misma de antes y hay mucho tiempo de carga). Por lo demás, no tuvimos ningún problema. Funcionó perfectamente. Y la experiencia, de unas cinco horas, fue excelente. ¡Recontra excelente!
Aclaramos que, en ese poquito tiempo, una especie de «intro» de lo que va a ser el juego completo, no hicimos grandes cosas, pero ¡qué bueno que está!
En nuestra review del año pasado (que pueden leer aquí: tiki), decíamos:
Si jugar se supone una experiencia, esta es una de las mejores, y por lejos. No para cualquiera, para los que tenemos corazón de exploradores, para los que nos fascinamos con la manera única de narrar historias, tan propia de los videojuegos. En Subnautica queda claro que el lenguaje narrativo del juego de video supera cualquier otro, con perdón del sacrosanto cine y la sabiduría milenaria de la literatura.
En Below Zero este cronista se sintió tan feliz de jugar como en el original. Ahora hay cosas nuevas junto al paisaje congelado. Pingüinos-pájaros alien de varios ojos (que se encabronan cuando les robás un pichón), peces más extravagantes (y feroces) que antes, plantas nuevas, y una dificultad ligeramente superior durante los primeros momentos, porque nadar cerca de la superficie –no queda otra al principio– obliga a tener en cuenta los grandes bloques de hielo que salpican el mar. Hay que rodearlos para ir a ciertos lugares, o tener suficiente oxígeno para pasarles por debajo.
Un survival horror acuático
Subnautica es un survival horror. Lo de survival es obvio: la mecánica consiste en bucear en busca de peces, rocas y plantas, y regresar a la cápsula para transformarlos en alimentos comestibles y herramientas, incluyendo equipo de buceo mejorado.
A medida que vamos encontrando elementos y fabricando herramientas y equipo, podemos llegar más lejos, más profundo, o ambas cosas, lo que va abriendo nuevas posibilidades y dispara los eventos de la narrativa.
En todo ese ir y venir mojado, recibimos indicaciones desde la estación orbital, y la exploración poco a poco va dándonos más planos y materiales para la fabricación de cosas cada vez más sofisticadas, siempre con el objetivo de sobrevivir. Poco a poco, ese destino inicial se va desplazando hacia otras cuestiones, más relacionadas con la exploración y con la vida inteligente natural del planeta, que al principio está oculta.
Ejemplo de cosas que fabricamos: agua potable, alimento, baterías, circuitos electrónicos, patas de rana que nos permiten nadar más rápido, tanques de oxígeno para bucear más profundo sin asfixiarnos, linternas, brújulas, cajas para almacenar materiales que queremos volver a buscar, y más adelante (en la versión final seguro van a estar) exoesqueletos, vehículos (batiscafos, submarinos) y hasta piezas para armar una base bien grande y cachonda como la que se ve al principio del juego.
Disponemos de una baliza portátil y con nombre configurable, con la que se puede señalar agujeros interesantes en el lecho marino o posiciones a las que queremos regresar mejor equipados.
¿Y la parte de horror de dónde sale? En esta versión en Early Access no hay nada todavía (excepto un pez boxeador) porque es corta y pura exploración, pero recordamos el primer juego.
En el abismo nadan cosas terribles, algunas tan enormes que se pueden tragar una ballena. Es oscuro y misterioso… El explorador va cada vez más profundo y de repente quizás distingue una construcción hecha por seres inteligentes. ¡Indy Jones un poroto! Mucho más no podemos decir, pero cuando lo jugamos la sensación fue tremenda, como uno de esos grandes episodios de Star Trek, ponele.
El resultado es un cóctel de supervivencia, construcción, exploración, con una historia que se despliega orgánicamente y siempre te mantiene enganchado.
El juego final va a tener cuatro modos de juego, igual que el primer Subnautica. Un modo de exploración (el normal), otro donde no tenemos hambre ni sed, otro donde hay una única vida (¡muy difícil!) y otro «libre», en el que podemos construir de todo sin juntar materiales.
A pesar del fresquete, recomendamos calurosamente este Subnautica: Below Zero. La versión final está prevista para octubre de 2019, así que a tenerlo en cuenta, micos del agua. [i]
DESARROLLADO Y DISTRIBUIDO POR: Unknown Worlds Entertainment
GÉNERO: Survival Horror
DISPONIBLE EN: Windows, Mac
LANZAMIENTO: Octubre 2019
Los juegos en Early Access no reciben puntaje, ya que se trata de una oportunidad de probar el juego durante su desarrollo y brindar feedback. Esta experiencia de juego no representa necesariamente la versión final.
Este análisis fue realizado a través de un código de PC provisto por sus desarrolladores.

Game & Narrative Designer. Co-fundador de Game Design LA. Profesor investigador. Autor de los libros «Diseño de juegos en América latina I: Estructura lúdica» y «II. Diseño y narrativa transmedia», entre otros. Autor de la novela-precuela de Vlad Circus: Descend into Madness (Indiesruption).
The Snowfox Update has arrived!
A new update is available for Subnautica: Below Zero. Travel quickly across the snowy tundra on a Snowfox, hide from terrifying beasts, explore two new biomes, and more in the latest update to Subnautica: Below Zero Early Access.