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Rune Factory 4 Special [REVIEW]

Rune factory 4 special head

Agricultura y acero

Amnesia, un título nobiliario flojito de papeles, un dragón buena onda, agricultura, jRPG, calabozos y dragones (cuac). Tremenda ensalada, pero toda orgánica, cultivada en casa. Analizamos Rune Factory 4 Special, un port para Nintendo Switch tan adictivo que nos deja al borde de terminar en una granjita, pero posta-posta.

Ante todo, una breve introducción para aquellos que no conocen la saga y estén a punto de largar un “¡otro más de granja!”. Rune factory es un spin off del legendario Harvest Moon, con lo cual este dato ya nos asegura cierta base de calidad.

Luego de haberla limado a morir, podemos asegurar que esta cuarta entrega no es la excepción. Rune Factory 4 Special es el port para Nintendo Switch de una de las mejores iteraciones de la saga, que originalmente se lanzó hace más de cinco años para 3DS.

Rune factory 4 special mazmorra

Rune Factory 4 Special es jRPG, granja, simulación social, combate, gestión de recursos… ¿qué cornos es esto?

Ante esa pregunta podemos responder, con una muy descarada soltura y sencillez, que es un juego abrumador. Rune Factory 4 Special es un despiole hermoso, tanto que implica comerse un tutorial —muy llevadero, aplausos— de casi tres horas para apenas comenzar a dominar cada una de sus mecánicas jugables.

¿Esto quiere decir que es más productivo hacer un curso online para logar el cupcake perfecto? Primero que nada, tal cosa no existe, ya que el cupcake es la definición de la decepción hecha masa: jamás el sabor estará mínimamente a la altura de la estética.

Diatribas pasteleras aparte, queremos asegurar que bien vale la pena comerse el tutorial para luego disfrutar de un juego complejo pero que brinda enorme satisfacción. Rune Factory 4 Special mezcla todo lo mencionado en este título: RPG, granja, simulación social, combate y gestión de recursos. A diferencia de la saga madre, aquí el combate tiene un lugar más que notable dentro de las mecánicas.

¿El resultado? Una vez que comenzamos a manejar las diferentes partes móviles, es un vicio que entretiene y siempre nos exige una hora más de nuestras vidas. Y, para colmos, tenerlo en una portátil es una invitación a que hagan cola para ir al baño en nuestras propias casas.

Rune factory 4 special runas

Rune Factory 4 Special: del príncipe flojito de papeles y la memoria en chapa y pintura

Asumiendo que tienen alta tolerancia, o incluso el gusto adquirido, a las “cositas raras” en los guiones japoneses, podemos asegurar que la trama los va a enganchar. Caso contrario, no teman, aún las cosas más extremas son bastante soportables para los paladares más occidentales.

Arrancamos el juego con un —o una— protagonista, que tiene una misión… más o menos clara. El problema es que es tan, pero tan secreta que no sabemos nada de ella. Para colmos, en pleno viaje en dirigible a nuestro destino, somos atacados por unos maleantes.

Producto de este ataque es una muy inoportuna pérdida de memoria y nuestro poco ortodoxo arribo a al Reino de Selphia. Básicamente, caemos desde el dirigible para aterrizar de bruces en la habitación de un dragón a través del techo.

Así es como conocemos a Ventusil, Ven para los amigos, un dragón re buena onda que se preocupa por mantener las apariencias de criatura milenaria, formal y sabia. De alguna manera somos empujados a empuñar un título nobiliario y comenzar a reinar Selphia, para ver si la hacemos levantar la puntería.

Entre todo este despiole de management, está nuestra misión de recuperar la memoria, cumplir la misión y ¿por qué no? tratar de conseguir pareja. No sólo pensando en el “calor humano”, sino para salir de aventuras en compañía, a patear unos monstruosos culos.

Rune Factory 4 Special: Fumándose habitantes con quilombitos psiquiátricos.

No solo la idea es que consigamos pareja a través de las mecánicas de simulación social, sino que podamos mejorar la calidad de vida de nuestros habitantes y nuestra relación con ellos. La cantidad de personajes únicos —cada uno con su “mambo cerebral”— es más que satisfactoria.

La preocupación por nuestra gente y las cosas que hagamos por mejorar su calidad de vida terminarán por redituarnos puntos de príncipe / princesa, los cuales podemos invertir en “órdenes. Estas, sirven tanto para mejorar o expandir la cuidad como para organizar festividades que mejoren el turismo y, por lo tanto, el “contentor” de nuestro pueblo. En consecuencia, cuanto más contentos estén, más “puntos de principado” obtenemos, lo que permite dictar órdenes más importantes, cosa que suele devenir en más felicidad para el pueblo. ¿Ya entienden por donde viene el beneficio de estimular este circulo virtuoso, verdad?

Rune factory 4 special pesca

Las penas son de nosotros, las lechugas son ajenas

Decíamos que este juego tiene muchas partes móviles. Si bien el aspecto de simulación social es de las más ricas, la exploración libre del mapa y el adentrarnos en calabozos (dungeons) no está para nada mal.  En estos últimos, además de despuntar el vicio en combate, resolvemos puzzles de buen diseño.

Claro que, de todas las actividades que podemos realizar, es probable que la más rica y compleja sea trabajar la granja. La agronomía es un aspecto central que une todas las otras actividades. Entre otras cosas, nos permite conseguir componentes para regalos y mejorar nuestro desempeño social. También, mejorar nuestra economía o incluso obtener runas para hacernos cada vez más pulentas — y así pararnos mejor ante seres y calabozos de mayor nivel de dificultad.

Rune factory 4 special dragon

No vives de ensalada

Aquellos que no estén habituados, quizás se apresuren a revolearnos  cascotazos por recomendar un juego sobre “plantar florcitas”. Por favor, no prejuzguen, si bien es el hilo que une todas las actividades, podemos decir que el juego tiene un excelente balance. Siempre tenemos algo para hacer y — muy a menudo— la agricultura suele ser el medio para concretar nuestros objetivos.

Esto no quiere decir que pasar tiempo con la naturaleza sea la única forma de lograr la progresión de nuestro personaje. También tenemos numerosas actividades, como el crafteo de ítems, cocinar, pescar… ok, quizás suene cada vez peor. Confíen en nosotros: se juega infinitamente mejor de lo que suena.

Rune factory 4 special mansion

Un aspecto a destacar — ¡al fin un port que lo implementa!— es el buen uso de la pantalla táctil de Nintendo Switch para facilitar ciertos atajos o tareas. Nos venimos quejando de esta omisión con cada rpg que portean, una vez que nos dan lo que ansiábamos, de mínima, ¡le tenemos que dedicar un párrafo!

Rune Factory 4 Special: Conclusión

Pese a tratarse de un juego sacado para una portátil de menor potencia, el salto a Switch no sólo es potable, se reafirma como juegazo. Este reino fantástico, con una onda muy medieval y clarísima estética animé es simplemente delicioso. La música es estupenda, nos acompaña generando los climas correctos en cada circunstancia.

Lo que sí, resulta una pena que —en un juego que depende tanto de los diálogos— no tenga una traducción al español. Si bien podemos poner subtítulos en inglés, aquellos algo oxidados van a tener algún dolor de cabeza y ni hablemos de aquellos que no entiendan un pomo.

Aún teniendo en cuenta este escollo, Rune Factory 4 Special es más que recomendable. Su adaptación a los controles, funcionalidades y potencia de Nintendo Switch es simplemente impecable.

Por otro lado, el desempeño es más que fluido tanto en modo portátil como en modo consola, pero sin dudas, por comodidad y porque el género lo pide, van a optar por darle átomos en el primero de ellos.

Claro que tiene aspectos — como el combate o el modelado de personajes de gran tamaño— donde se nota el paso del tiempo y que se trata de un port de 3DS. No obstante, el contrapeso apenas si le hace un poquito de mella a la experiencia general.

Conclusión II, con clara influencia del árbol genealógico

Nos parece una barbaridad y un atropello a la razón que no esté la opción de sembrar radicheta. ¡Se nota que no hubo un solo tano en el desarrollo, porca miseria!. [i]


DESARROLLADO POR: Marvelous
DISTRIBUIDO POR: Meridiem Games
GÉNERO: jRPG, simulador social, Gestión de granja.
DISPONIBLE EN: Nintendo Switch

QUÉ ONDA: Nueva entrega del spin off de Harvest Moon, que hace rato se ganó el derecho a mudarse solo.
LO BUENO: Gran historia. La simulación social. La variedad de opciones a la hora de emitir órdenes. Mucho fan service para seguidores de la(s) saga(s). Gran estética, ambientación y música. A pesar de ser port, utiliza las funciones táctiles de la consola. Algunos calabozos se zarpan en diseño. Puzzles muy interesantes. Cantidad de contenido y horas de juego peligrosos para un título tan adictivo.
LO MALO: Sin subtítulos en español en un juego con toneladas de diálogooo. Algunos componentes se sienten viejos. Por momentos, la historia tiene giros extraños y un humor demasiado oriental.

Este análisis de Rune Factory 4 Special fue realizado a través de un código de Nintendo Switch provisto por sus desarrolladores.

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