Mr. Driller DrillLand [REVIEW]

Locos por el taladro

Lisérgico, colorido y absurdo como comercial de Mr. Chispa, llega a Nintendo Switch Mr. Driller DrillLand. Prácticamente desconocido por estas latitudes, se trata de un port bastante popular en Japón, que tuvo su lanzamiento original unos veinte años atrás en GameCube. ¿Están listos para perforar como desaforados, siendo la locura y el absurdo de ser “campeones del taladrado” la única excusa?

Podríamos decir que Mr. Driller DrillLand propone una mecánica de puzzle, donde agrupamos elementos por colores para luego destruirlos y sumar puntos. Pero esta reducción, este paralelismo con los “aprietacaramelos” más casuales, resulta casi ofensivo.

Incluso esta entrega lo aleja aún más de estas simplezas, dotando el juego de una cantidad de variantes que en principio ni nos imaginamos. Resulta que Mr. Driller y sus amigos, que comparten esta extraña compulsión afición por taladrar cosas son invitados a un parque de diversiones, pero dedicado para “enfermos del taladro”.

¿Existe una historia que justifica esto? Sí, pero no tiene ni pies ni cabeza, es una bizarreada y cualquier intento por entenderla nos destrozará los nervios. Pero esta ambientación funciona como una gran excusa para dotar al juego de una variedad increíble.

Mr. Driller DrillLand: Parque de diversiones a toda mecha

Justificado y tirado de los pelos por el entorno, cada una de las atracciones temáticas — que van desde la casa del horror hasta un guiño a la aventurera arqueología de Indiana Jones— nos presentan los más variados retos y mecánicas jugables.

Por ejemplo, en la casa del horror nos persiguen vampiros que, para derrotarlos, primero debemos recolectar agua bendita. Luego, esperar a que estén posados en un segmento de ladrillos del mismo color. En ese momento, debemos inyectar el agua a los bloques, lo que paraliza a los monstruos. Por último, destruimos el conjunto de bloques, acción que también matará al enemigo. Esta es sólo una muestra de lo que habíamos dicho antes sobre la variedad de mecánicas, complejas y originales.

Por otra parte, una de las características de la serie es que tiene un ritmo muy frenético, donde la combinación de ladrillos es importante, pero también lo es la velocidad. Además, debemos estar en todo momento pendientes del oxígeno que nos queda disponible mientras vamos descendiendo, para recolectar nuevas recargas y no palmarla.

Por último, pero no por ello menos importante, está la fuerza de la gravedad, siempre al acecho, esperando que hagamos una perforación despreocupada para que una pila de bloques se nos caiga en la cabeza y nos deje sin pulso.

Mr. Driller DrillLand para todos

Para aquellos que no terminen de relajarse con la propuesta más avanzada, también existe un modo muy simple, clásico y básico, que nos permite jugar mientras tomamos el té y hacemos yoga. 

Además de las variantes mencionadas, tenemos una oferta competitiva y cooperativa, las cuales pueden ser disfrutadas de dos a cuatro jugadores. La contra es que sólo está disponible de manera local y no hay posibilidad jugar online.

Aunque la limitación anterior puede resultar un bajón, la estética es tan simpática y apta para todo público que resulta un juego muy agradable para jugar en familia, todos juntitos en el sillón. De manera que se lo perdonamos… pero que no lo vuelva a hacer, ojo.

En definitiva, Mr. Driller DrillLand es un muy buen port, adictivo a base de ofrecer una jugabilidad endiablada y un aspecto visual muy agradable, adaptado a las resoluciones de hoy en día. Por si fuera poco, la música termina de redondear el producto, acompañando tanto la frenética jugabilidad como las escenas animadas (de una factura excelente) ¡Gran juego para toda la familia! [i]

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DESARROLLADO POR: Bandai Namco / Project Driller
DISTRIBUIDO POR: Bandai Namco
GÉNERO: Puzzle
DISPONIBLE EN: Nintendo Switch

QUÉ ONDA: Un port de un gran juego que nunca salió de Japón, que 20 años después aterriza en nuestras Nintendo Switch.
LO BUENO: Estética excelente. Divertido para jugar localmente, cooperativo o competitivo. Apto para toda la familia. Buenas ideas profundizan la clásica mecánica de destruir bloques por color.
LO MALO: El modo competitivo local a la larga se vuelve un poco soso. Las cinemáticas tienen un humor oriental tan bizarro que a más de uno pueden provocarle un colapso nervioso.

Este análisis de Mr. Driller DrillLand fue realizado a través de un código de Nintendo Switch provisto por sus desarrolladores.