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Mario Party Superstars [REVIEW]

Volver al futuro

¿Por qué mirar al pasado si, en la actualidad, hay grandes exponentes del “party game”? Diferentes temáticas, mecánicas y exigencia jugable… hay para todos los gustos (y motricidades finas). No obstante, existe algo especial que siempre destaca a esta IP. Porque todas quieren ser divertidas, pero algunas simplemente quiere ver el mundo arder. ¡Mario Party Superstars logra ambas!

https://youtu.be/wdXiA7ffphU

Si bien la trayectoria de la saga tuvo altibajos, “los Mario Party” tienen un lugar privilegiado dentro del género. Su última entrega —Super Mario Party (2018)— hizo casi todo bien y, de alguna manera, apostó por una vuelta a lo clásico. Claro que con reglas y modificadores nuevos, además de ser imprescindible utilizar los controles por movimiento de la Nintendo Switch.

Por supuesto, la salida al mercado de la Nintendo Switch Lite, dejó afuera de este título a gente que no tenía Joy Con que despegar de la consola. ¿Existirán personas que quisieron jugar y terminaron con traumatismos de cráneo a puro consolazo?

Quizá debido a esto, Nintendo —que a la hora de facturar no se le escapa una— tuvo una idea genial. ¿Por qué no metemos a todos nuestros usuarios en la fiesta y, de paso, hacemos un homenaje a los mejores juegos de la saga?

El museo de las fiestas

De esta forma es como nace Mario Party Superstars: una recopilación de los mejores tableros y mini-juegos, traídos desde las épocas de N64 y GameCube al presente. Sin controles de movimiento y alejado de los locos modificadores de Super Mario Party.

En resumen, tenemos a disposición cinco excelentes tableros clásicos, estupendos para insultarnos a los gritos con familia y amigos. La lista abarca Yoshi’s Tropical Island, Peach’s Birthday Cake, Space Land, Woody Woods y Horror Land. Cada uno de ellos tiene sus mecánicas especiales y exclusivas, diferentes entre sí y para nada complejas. Pese a esta simplicidad, su buen uso puede dar vuelta una partida, convirtiéndonos en un vampiro del sufrimiento ajeno.

Sin duda, Mario Party Superstars lo mantiene simple y esa es la clave de que funcione bien. Tiramos el dado, avanzamos casilleros del tablero virtual, ganamos monedas y tratamos de llegar a la casilla donde venden estrellas para comprarnos una. Luego, cuando termina la última ronda, el que tiene más estrellas, gana.

Claro que, las verdaderas estrellas, llegan al final de cada ronda. Es el momento donde participamos de un minijuego: todos contra todos, tres contra uno o dos contra dos. En su mayoría, son simples, efectivos y sin controles de movimiento. Claro que hay medida docena que no sé quién, en su sano juicio, pudo elegir para formar parte del “dream team”, pero no mueven la aguja.

Fiesta personalizada

Otra cosa que Mario Party Superstars hace bien es la posibilidad de personalizar las partidas. No posee un abanico de opciones bestial, no obstante nos brinda lo necesario para disfrutar al máximo. Desde ajustar el número de rondas —advirtiendo el tiempo aproximado que durará la partida— hasta la dificultad de los minijuegos. Esto último es ideal para salvaguardar el sistema nervioso de los jugadores más casuales y con menos coordinación.

Por otra parte, aún ajustando esta dificultad, no hay nada más “inclusivo” que el control de movimiento. Por mejores que sean los minijuegos, esa simplicidad y accesibilidad se siente como una pérdida de una entrega a la otra.

Asimismo, algo que es común en la saga, aquí se repite: jugar solo, contra la CPU, es un TREMENDO embole. Sí, podemos jugar en línea, sin embargo sabemos que este tipo de juegos están pensados para gritarse en la cara y darse “semi-amistosos” puñetazos en los brazos.

Entonces, ¿es un juego a evitar? En absoluto. La diversión está garantizada, es la crema de los viejos “Mario Party”. Con lo anterior, queremos decirles que, si lo que buscan es lo mejor de la saga, ya lo tienen con la entrega previa, Super Mario Party. Ahora, si ya lo gastaron y buscan nuevas (viejas) excusas para odiarse entre sí, Mario Party Superstars es más que recomendable. [i]


DESARROLLADO Y DISTRIBUIDO POR: Nintendo
GÉNERO: Party game
DISPONIBLE EN: Nintendo Switch.

QUÉ ONDA: Más que un juego, un detector de fisuras de relaciones humanas.
LO BUENO: Casi impecable selección de tableros y minijuegos. Las mejoras de calidad de vida.
LO MALO: Algunos minijuegos no envejecieron bien. La falta de controles de movimiento limita su accesibilidad. Jugar solo sigue siendo un embole astronómico.

Este análisis de Mario Party Superstars fue realizado a través de un código de Nintendo Switch provisto por sus desarrolladores.

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