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Phantom Fury [REVIEW]

Un misil de nostalgia que apunta a nuestros corazones

Si vivieron el cambio de jugar los first person shooters con las flechas del teclado a las teclas WASD, si festejaron cuando se le agregó media dimensión a su vida para pasar de las 2.5D a las 3D, entonces querrán saber que de la mano de 3D Realms llega Phantom Fury, un misil de nostalgia teledirigido a nuestro corazón. La pregunta es, ¿acertará? ¡Vamos a averiguarlo!

Phantom Fury es la secuela de Ion Fury, un FPS que tiene una reminiscencia automática con Duke Nukem 3D, tanto en el apartado gráfico como jugabilidad. A su vez, Ion Fury es la secuela de Bombshell, un shooter multidireccional donde conocemos por primera vez a la protagonista de esta saga: Shelly “Bombshell” Harrison y a su poderoso brazo de metal.

La nueva entrega de esta franquicia es un shooter de los viejos para los nostálgicos. Palpable ya de entrada por su estilo de menú con su selección de dificultad, la casi inexistente introducción, que nuestra salud se mida de 0 a 100, que necesitemos tarjetas de colores para pasar por puertas, junto a una propuesta estética que parece de un juego de fines de los ‘90. El problema es que, al examinarlo en detalle, encontramos las diferencias que le juegan en contra.

Half… Half Life

Si Ion Fury, la anterior entrega de la saga, buscaba estéticamente parecerse a Duke Nukem 3D, Phantom Fury, busca serlo de Half Life, tanto en los gráficos como en la similitud de la historia. Comenzamos en una base militar donde se hacen experimentos, luego al salir de ella, vemos que estamos en el desierto, donde hay un ejército que busca eliminarnos, y las coincidencias siguen. Esta búsqueda es intencional y está lograda, pero solo estéticamente.

Los escenarios suelen estar vacíos, no hay tantas recompensas por alejarse de la ruta principal. Pero fundamentalmente, la diferencia se aprecia en que la historia de Half Life, aunque simple, tiene un final épico. Sin spoilear nada, no es el caso aquí. Shelly sigue aportando one liners al estilo Duke Nukem, cosa que si bien es repetitiva, en mi caso personal prefiero por sobre Gordon “el mudo” Freeman.

Las armas son más de 20 según el desarrollador. Yo conté 16, pero si eran 3, era lo mismo. A diferencia de otros juegos, en este al no ser su fuerte la estrategia, no varía mucho qué equipo vamos a emplear para matar a tal o cual enemigo, pero por lo menos la variedad es interesante. A medida que vamos progresando tenemos disponibles upgrades  para las armas, cosa que si bien no es trascendental, suma más al entretenimiento que a la táctica.

De la misma forma que sucede con el arsenal, si bien hay variedad de enemigos, en términos de dificultad son muy repetitivos. Como positivo, rescatamos el concepto del brazo de metal de Shelly, que al golpear con él no solo es placentero, sino hasta terapéutico.

Gameplay ideal para amantes de disparar primero y preguntar después

El gameplay es aceptable. El juego desde el inicio nos da a entender que la idea es dispararle a todo lo que se mueva sin una gran estrategia, como mucho cubrirse eventualmente. Los puzzles para progresar por los escenarios aprueban, no son difíciles, sino acordes al género y no lo retrasan innecesariamente. El juego intenta no ser repetitivo, ofreciendo variedades de momentos como manejar una camioneta, helicóptero, o un submarino. Incluso tiene fases de sigilo. El problema es que todos estos modos son relativamente simples y no logran evitar generar esa sensación de escenarios repetitivos.

Una cosa que encontré bastante molesta es que Phantom Fury presenta muchas veces ayudas visuales demasiado obvias para progresar en la historia. Por ejemplo, nos aparece un cartel que nos dice que vayamos al ascensor y vemos un cartel grande que dice “ascensor” arriba de una puerta. Hubiera preferido que incentive un poco más la búsqueda por parte del jugador, para disfrutar la recompensa de avanzar al siguiente nivel.

La IA, el peor enemigo

El fin del efecto nostalgia llega cuando nos chocamos con la IA y los bugs. Por suerte existen los updates y ojalá este párrafo lo lean tachado en un futuro. Si bien no es algo que suceda todo el tiempo, quedarse atrapado entre cajas, ser expulsado varios metros de forma random como si nos hubiera explotado una bomba cerca, o enemigos que se quedan esperando congelados como estatuas, son una realidad que uno no espera en un juego terminado.

Las paredes invisibles abundan y sobre todo confunden. A veces quería avanzar porque veía más adelante de una pila de autos rotos, un camino. Pero Phantom Fury no quería que salte esos autos, generando una pared invisible, sin dejarme pasar. Asumí que tenía que seguir por otro lado, pero lo que el juego quería era que lance un misil para hacerlos explotar, para recién ahí me dejarme progresar.

La sumatoria de estos pequeños detalles generan un desencanto fácil en un fichín que promete más, y que con un poco de esfuerzo podría llegar a cumplir su promesa fácilmente.

Un juego honesto con algunas sensaciones positivas y no mucho más

Phantom Fury es un juego honesto en sus pretensiones: su estética y su estilo de juego nos llevan inmediatamente a los FPS de fines de los ‘90. Busca ser exactamente eso, un shooter de ese estilo y época. Tiene variedad, puntos altos, entretiene por momentos, pero en ese intento tiene que competir con los clásicos: tanto parecerse a Half Life, me dan más ganas de revisitarlo que jugar este juego. Es muy probable que el cambio de desarrollador respecto a la entrega anterior (de hecho cada entrega tuvo uno distinto) le termine jugando en contra para lograr una identidad común a lo largo de la saga.

Shelly merece más. Nosotros merecemos más. Esperemos que con un update puedan mejorar la mayoría de estos problemas y convertir, con poco, a Phantom Fury en un gran juego. [i]


DESARROLLADO POR: Slipgate Ironworks
DISTRIBUIDO POR: 3D Realms
GÉNERO: FPS
DISPONIBLE EN: Windows, PS5, Xbox Series X|S, Nintendo Switch, PS4, Xbox One.

QUÉ ONDA: Un shot de nostalgia que pega más al principio que al final.
LO BUENO: FPS pochoclero, ideal para los que su estrategia predilecta es correr y disparar al mismo tiempo.
LO MALO: Muchos espacios vacíos, algunos bugs, mala IA.

Este análisis de Phantom Fury fue realizado a través de un código de Steam provisto por sus desarrolladores.

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