Reviews

Astro Bot [REVIEW]

Es por acá, Sony

¡Qué bien le salen los juegos a Sony cuando se pone las pilas y hace lo que mejor sabe! Experiencias para un jugador, divertidas y bien diseñadas por gente que la tiene clara. Acá no parece haber aparecido ningún ejecutivo de esos que no entienden nada de la industria y, por desgracia, en la actualidad parecen ser plaga. Después de jugar Astro Bot, es como si el “incidente Concord” hubiera pasado en otra dimensión, una donde Sony estuvo completamente perdida. ¡Por suerte, Astro Bot se manda de cabeza al rescate y vuelve todo a la normalidad!

Team Asobi es el cerebro detrás de esta joyita llamada Astro Bot. El equipo, que originalmente era una división interna del histórico Japan Studio de Sony, dio el salto en 2021, cuando Sony decidió reestructurar todo y convertirlo en un estudio independiente bajo el ala de PlayStation Studios.

Hasta ahora, el título que más ruido hizo fue Astro’s Playroom. Un juego que vino de regalo con la PlayStation 5 y que, en los primeros minutos, parecía ser una simple “demo técnica glorificada” para mostrar las bondades del DualSense. Pero después de un rato, nos dimos cuenta de que estábamos frente a una genial aventura casi completa. Una mezcla perfecta de buen diseño, tanto estético como jugable, que además nos inyectaba litros de nostalgia Sonyer en las venas.

¿Con qué nos encontramos años después, en este Astro Bot? Con un Team Asobi desatado, sin restricciones, y con el tiempo necesario para hacer lo que mejor saben. Demuestran una habilidad tremenda para mezclar mecánicas innovadoras con un diseño que es accesible y, sobre todo, divertido para jugadores de todas las edades. Acá no hay microtransacciones, ni pases de batalla, ni complicaciones al divino botón. Solo diversión clásica, con desafíos para todos los gustos y habilidades.

Érase una vez…

Una suerte de “nave PlayStation 5” surcaba el espacio sin preocupaciones. Y ojo, porque podría tenerlas, ya que esta nave-consola era sintiente, como todos sus componentes internos. No había una sola pieza de hardware que no tuviera una expresión feliz en su… ¿“rostro”? Dentro de esta nave tan improbable viajaba también una alegre tripulación de Astro Bots, en plena joda espacial.

De repente, un extraño alienígena verde, con pinta de pulpo, pero fusionado con su platillo volador, aparece en escena. Sin ninguna motivación aparente más que arruinarnos la existencia, el pulpo maldito destruye nuestra nave, dispersando sus componentes por todos lados. Evidentemente, lo que buscaba era la CPU, que se la queda para sí. ¿Para qué? En principio, solo para torturarla por pura diversión. ¡Me caen bien estos villanos! ¡Pulpos alienígenas que solo quieren ver el mundo arder! De esta manera, nuestra nave se estrella en un planeta cercano, terminando de hacerse puré.

Es en este punto cuando Astro Bot recupera el conocimiento y, al ver el desastre, arranca la aventura. Dos objetivos quedan claros: rescatar al resto de la tripulación y recuperar todos los componentes esparcidos por el espacio, para arreglar la nave. ¡Fácil! ¡Solo hay que cruzar planetas enteros llenos de enemigos y trampas mortales! ¡Nada que un bot con tanta onda no pueda manejar! Así, nos subimos a una especie de “DualSense-nave espacial” y despegamos a la aventura.

Saltando a la gloria

Astro Bot es tan adorable, simpático y divertido que no necesita mucho más. Ni siquiera una historia que tenga pies y cabeza. ¿Cómo se llama el villano? Si lo dijeron en algún momento, no lo retuve y no tengo la más mínima idea. ¡Pero no importa! Ese no es el punto de este juego, ni de cerca. Esto es un juego de plataformas y aventuras, donde claramente Team Asobi se rompió la cabeza para que nosotros disfrutemos de la experiencia más directa y hermosa posible, sin complicaciones. 

Acá seguimos un desarrollo bastante lineal. Ojo, hay varios niveles extra que parecen diseñados especialmente para los que ya se afeitan el bigote, con picos de dificultad interesantes. Pero, en general, no es un juego difícil ni complejo, porque siempre tiene en cuenta a su público infantil. Si esto no les cae en gracia, quizás deban reconsiderar jugarlo. Pero les aseguro que la experiencia general vale la pena, aunque se tengan que comer niveles “facilongos”. Salvando las enormes distancias, tiene esa vibra “juego de Lego”. Eso sí, algunos checkpoints son medio polémicos, obligándo a repetir secciones que podrían frustrar a un infante. Pero bueno, que se curtan, ¡de otra manera no soltarán Roblox y nunca llegarán a jugar un Soulslike!

La magia de verse y sonar excelente

Ya en acción, salta a la vista que Team Asobi abraza esa máxima que alguna vez declaró el legendario Shigeru Miyamoto. En concreto, el papá de Mario decía que un personaje no solo tiene que ser divertido de jugar, sino también entretenido de ver mientras se mueve e interactúa con el mundo. Y en Astro Bot, esto lo logran con perfección absoluta. Las animaciones, aun cuando no movemos al personaje, son hermosas, divertidas y fluidas. Lo mismo ocurre con los enemigos, con variedad más que adecuada, donde cada diseño además nos anticipa las estrategias para derrotarlos.

Los entornos no se quedan atrás. La calidad y variedad de biomas es infernal, manteniendo esa impronta simpática y adorable en cada uno. Pero, además, las formas en que interactuamos con ellos son una clase magistral de game design. Caminar por la arena, la nieve, el hielo, nadar… todo es excelente. Ni hablar de los enfrentamientos con jefes, donde cada galaxia tiene el suyo. No solo son muy graciosos, sino que no repiten mecánicas y cada uno aporta su dosis de originalidad y diversión.

Ah, pero esperen… el diseño de sonido en general es buenísimo… pero la música… ¡POR FAVOR, LA MÚSICAAA! Enloquecí. Desde los últimos Rayman o incluso el nivel con Uptown Funk en Sackboy: A Big Adventure, que no escuchaba algo tan espectacular y tan en sintonía con lo que ocurre en pantalla. Sin duda, la primera vez que mi mandíbula tocó el piso y mis oídos empezaron a aletear fue en el nivel del árbol. Si lo juegan, se van a dar cuenta y van a decir: “claro, con razón Cenizas quedó 5 minutos catatónico”. Y no es para menos: su compositor, una maravillosa bestia escocesa llamada Kenneth Young, es el culpable de que se nos hayan pegado las melodías de todos los Little Big Planet. Pero aquí, en Astro Bot, se fue de tema… cuac.

Artefactos locos y cameos épicos

Astro Bot no se complica con sistemas de progresión. Pegamos trompadas, cargamos el golpe, saltamos y flotamos con dos líneas de energía en los pies, que también sirven para eliminar enemigos. Solo con este breve repertorio ya le alcanzaría para triunfar en el apartado jugable. Puede que no sea mucho, pero le basta para combinar de varias maneras, no solo para repartir bifes, sino también para interactuar con el entorno.

Pero, por supuesto, no podían quedarse solo con eso. Frecuentemente, tenemos diferentes artefactos que cambian nuestra forma de combatir o de interactuar con los escenarios. Guantes de boxeo extensibles que mejoran nuestro alcance y poder de piñas. Una mochila rociadora que puede contener líquidos y expulsarlos a nuestro antojo. Un dispositivo que ralentiza el tiempo, permitiendo maniobrar mejor o incluso hacer pie en objetos en movimiento. Así, decenas de artilugios que modifican la jugabilidad de manera constante.

Por supuesto, el uso intensivo de las bondades del DualSense también está presente. El estudio no olvida sus orígenes y le vuelve a encontrar la vuelta para aprovechar al máximo las funciones hápticas, incluso el parlante y el micrófono integrados. No llega al nivel excepcional de lo que vimos en Ratchet & Clank: Rift Apart, pero está muy por encima de la media de los juegos de PS5.

Y, cómo no, los cameos de personajes de diferentes franquicias de Sony y clásicos del videojuego, de hoy y de siempre, no podían faltar. ¿Quiénes? No les voy a arruinar la sorpresa, prefiero que salten de la silla con cada aparición. Ya bastante con las imágenes que pongo en la nota, alguna se me va a escapar. Primero que nada, destilan una simpatía tremenda, con geniales adaptaciones a la estética del juego. Pero además ocurre que, en muchos de estos cameos, podemos usar las habilidades de los personajes en cuestión. Ok, voy a spoilear uno: el nivel donde usamos cierta hacha mágica de cierto dios griego emigrado… Cine.

En conclusión…

Helldivers 2 es el único título que me hace dudar si Astro Bot es el mejor juego que Sony publicará en 2024. No tengo idea de quiénes fueron los ejecutivos responsables de acompañar la producción de este estupendo juego, pero, por favor, asciéndanlos. O cómprenles algo lindo, que sé yo. Y aquellos que se encargaron de Concord, denles un cafecito y ábranles un Excel para que no hagan más daño y se entretengan ahí, hasta el fin de los tiempos.

Y, por supuesto, un monumento para Team Asobi. Porque Astro Bot no solo logra rescatar a todos sus amigos, sino también a su distribuidor, justo después de comerse una piña que va a quedar para la historia. Queremos juegos divertidos, con alma y carisma. Algo me dice que los días de “demo técnica” ya quedaron en el pasado, y, más temprano que tarde, veremos a Astro Bot otra vez, de titular y jugando en primera en el equipo de PlayStation. [i]


DESARROLLADO POR: Team Asobi
DISTRIBUIDO POR: PlayStation Studios
GÉNERO: Plataformas, Aventura
DISPONIBLE EN: PS5

QUÉ ONDA: Diversión, plataformas, creatividad, toneladas de cameos y mucha onda en cada salto.
LO BUENO: Diseño espectacular de escenarios, música, jefes, gráficos… TODO. El uso del DualSense. Diversidad en lo jugable. Accesible para todas las edades.
LO MALO: Pese a que tiene niveles especiales con mayor reto, alguno podría sentir que su accesibilidad es un problema. Las ubicaciones de algunos checkpoints podría desanimar a los más pequeños.

Este análisis de Astro Bot fue realizado a través de un código de PS5 provisto por sus desarrolladores.

  • CALIFICACIÓN90%
90%

Un Comentario

Escribe un comentario