La Maldición de las Comparaciones
Elden Ring es, para muchos, una de las mejores experiencias que nos dejó la generación pasada. Un mundo abierto meticulosamente diseñado, jefes inolvidables y una curva de dificultad que equilibra la brutalidad con la satisfacción del aprendizaje. Entonces, FromSoftware decidió sacudir el tablero con Elden Ring: Nightreign, un roguelike multijugador en el que los días y noches pasan a un ritmo frenético, los mapas cambian con cada partida y el sigilo es un lujo que no podemos darnos. Durante el fin de semana, tuvimos la chance de meterle varias horas a la beta y, bueno… fue un torbellino de emociones. La pregunta del millón es si esto realmente funciona y la respuesta es un ambiguo “depende”.
El mayor obstáculo que enfrenta Elden Ring Nightreign no son los enemigos ni la estructura procedural de sus mapas. El mayor problema es que lleva el nombre Elden Ring, lo que inevitablemente hace que entremos con ciertas expectativas. Pero una vez adentro, nos damos cuenta de que esto es otra cosa. Si bien el combate es familiar—con esquivas, ataques pesados, artes de arma y la sensación de impacto que caracteriza a FromSoftware—el ritmo es un bicho completamente distinto.
Acá no hay exploración contemplativa ni construcción de builds meticulosas. La filosofía de “morí, aprendé, volvé a intentarlo” se transforma en “morí, corré, agarrá lo que puedas y volvé a intentarlo”. La tensión de perder progreso en una run de 40 minutos es tangible y le da un sabor propio, pero también puede ser frustrante para quienes vienen buscando un sucesor directo de Elden Ring.
El Caos es la Norma
El gran gancho de Elden Ring Nightreign es su estructura procedural. Cada vez que arrancamos una partida, el mapa se genera con nuevas ubicaciones, enemigos y recompensas. En teoría, esto debería hacer que cada run se sienta distinta y fresca. En la práctica, la beta mostró algunos “temitas”.
Si bien la aleatoriedad en los enfrentamientos y recompensas se siente bien implementada, la distribución de escenarios y puntos de interés no siempre fue la mejor. Hubo momentos en los que nos encontrábamos recorriendo secciones muy similares a runs anteriores, con estructuras repetitivas que nos hacían dudar cuán radicalmente cambiará el mundo en la versión final.
A esto hay que sumarle el caos del combate en cooperativo. Con tres jugadores en simultáneo enfrentando a hordas de enemigos, el orden de batalla muchas veces se desmorona en un festival de espadazos, explosiones y efectos visuales que pueden volverse caóticos.
Clases, habilidades y la falsa sensación de build
En lugar de permitirnos crear nuestro propio personaje con stats personalizables, Elden Ring Nightreign nos ofrece un set de clases predefinidas con habilidades exclusivas. En la beta pudimos probar cuatro de ellas, cada uno con su propio estilo de combate y mecánicas particulares.
Si bien las clases son lo suficientemente distintas como para marcar una diferencia en el gameplay, el sistema de loot y progresión hace que la personalización se sienta limitada. Muchas veces terminamos equipando la mejor arma que encontramos en el camino, sin mucha posibilidad de construir una build pensada con antelación. Esto podría cambiar con la versión final, pero por ahora da la sensación de que Elden Ring Nightreign quiere que nos adaptemos en el momento en lugar de seguir un plan a largo plazo.
Conclusión: Una apuesta arriesgada
Elden Ring: Nightreign es, en muchos aspectos, una jugada extraña. No es un Soulslike tradicional ni un roguelike puro, pero aun así se las arregla para generar momentos de tensión y adrenalina que justifican su existencia. La beta dejó en claro que hay una base sólida, pero también levantó muchas dudas.
¿Será lo suficientemente variado como para mantenerse fresco a largo plazo? ¿La progresión y el sistema de loot mejorarán para dar una mayor sensación de control sobre nuestro personaje? ¿El caos del combate en cooperativo se volverá una fortaleza o una fuente constante de frustración? Lo descubriremos el 20 de mayo. Hasta entonces, nos quedamos con la sensación de que Nightreign puede ser un giro interesante dentro del universo de Elden Ring. [i]
Este análisis de Elden Ring Nightreign fue realizado a través de un código de PS5 provisto por sus desarrolladores.

Gustavo Sobrero, alias El Cenizas, es Secretario de Redacción de [IRROMPIBLES] y fundador de la Iglesia Savathûnista. ¿Tienen dos minutos para que les hable de Savathûn, que es el Camino y la Salvación? Pueden seguirlo en Twitter (@ElCenizasWTF) y en Instagram (@el_cenizas).