Wildgate promete tiros, jetpacks y loot

Wildgate ya tiene fecha de lanzamiento: 22 de julio de 2025. El nuevo shooter cooperativo espacial de Moonshot Games, parte de Dreamhaven, llega a PC, PS5 y Xbox Series X|S. Y como la espera pica, hay beta abierta del 9 al 16 de junio. ¡Gratis! ¡Para todos! ¿De qué va la cosa? Somos parte de una tripulación de Prospectors, gente que se gana la vida viajando por un sector del espacio llamado The Reach, donde todo brilla, todo explota y nadie te devuelve el saludo. Ahí vamos, en busca de tesoros alienígenas, reliquias raras y peleas con otras tripulaciones. Básicamente, piratería en modo cooperativo.

La beta trae novedades jugosas. Se suman dos personajes jugables: Kae, con poderes telequinéticos para mover cosas (y moverse ella), y Adrian, que va con jetpack y ahorra un montón en zapatillas. También aparecen nuevos puntos de interés: una refinería, una estación de perforación y una nave enorme con cara de pocos amigos. Todo esto en mapas con generación procedural, para que no podamos memorizar nada y la improvisación sea ley.

Además, pulieron muchas cosas. Misiones diarias renovadas, mejor rendimiento, interfaz nueva y varios arreglos que los testers venían pidiendo. El objetivo es que la experiencia sea fluida, tensa y adictiva. El corazón del juego está en la cooperación. No importa si somos héroes, estafadores o pilotos que recién aprenden a estacionar. La clave está en el trabajo en equipo: planear, entrar, robar o destruir, y salir vivos… si se puede. 

Y ojo, Wildgate no se trata solo de matar bichos espaciales. Hay que buscar The Artifact, el premio mayor. Podemos extraerlo o eliminar a todos los demás. No hay reglas fijas, solo decisiones rápidas y consecuencias explosivas. 

Moonshot apunta a un nicho claro: cooperativo táctico, sci-fi, con mapas que cambian y tensión constante. La comparación con Escape from Tarkov y Sea of Thieves, pero con naves y rayos láser, no está tan lejos. La clave será que la exploración, el combate y la extracción se sientan igual de emocionantes. Si logran mantener esa tensión sin volverse caótico o frustrante, podríamos estar ante uno de esos indies que pegan fuerte.