Mario vs. Donkey Kong [REVIEW]
Lanzado originalmente en 2004 para Game Boy Advance con el nombre de Mario vs. Donkey Kong, ahora vuelve 20 años después como remake para Switch. ¿Qué tiene de nuevo para ofrecernos?
Lanzado originalmente en 2004 para Game Boy Advance con el nombre de Mario vs. Donkey Kong, ahora vuelve 20 años después como remake para Switch. ¿Qué tiene de nuevo para ofrecernos?
La nueva aventura en 3D de Sonic trata de destacarse con un “mundo abierto” y una historia más adulta, sin soltar la mano de viejos vicios que terminan dando un resultado desparejo pero con buenas intenciones. ¿Un sprint en la dirección correcta?
Nintendo le pega apenas una capa de pintura a sus batallas de tinta en una tercera entrega que mejora un poco todo lo que la saga ya hacía, con algunos agregados que se agradecen pero sin grandes sorpresas.
La trilogía moderna de Shadow Warrior se completa con una entrega que busca la simplificación y pierde tanto profundidad como originalidad en el camino.
Wario y su pandilla vuelven con todo en otra entrega de la serie, esta vez protagonizando sus propios minijuegos, con nuevos aspectos de personalización pero sin sacarle del todo el jugo a la consola.
Casi dos años y medio después de su lanzamiento en PC y consolas, Unruly Heroes —que analizamos en su momento— inicia una nueva peregrinación al poniente. Pero esta vez, en formato portátil para Android e iOS. En la editorial le estuvimos metiendo dedo al port de Android y les dejamos nuestras impresiones digitales a continuación.
Si les gustó la primera entrega, probablemente la segunda les va a encantar. Caso contrario, denle una oportunidad a esta secuela que con un estilo retro y nuevos modos de juego busca ganarse un lugar en nuestro corazón.
Divertido, aterrador y atrapante, Little Nightmares II construye sobre su predecesor para hacernos sentir tanto la urgencia de escapar, como de desentrañar el destino de su protagonista.
Es difícil no recomendar Disc Room, un juego altamente adictivo de controles y conceptos tan simples que cualquiera puede comenzar a jugarlo en un instante. Desafiante, un poco frustrante a veces pero no lo suficiente para que queramos soltarlo. Breve y rejugable. Otra prueba concreta de que los conceptos más simples pueden ser los más filosos.
¡Que bien le viene a Witcheye desembarcar en la consola portátil! A sus controles táctiles ya existentes, que acá se mantienen, se le suma la posibilidad de manejarlo con las clásicas palancas, pudiendo tener una mayor precisión de movimiento y evitando así taparnos el escenario con nuestros dedos de chorizo.