[COBERTURA] Presentación de UFC 2 en Argentina

Aiii of de taaaigueeeer!

No hay nada mejor para micos bien comidos como nosotros que ir a un evento de presentación de un juego en pleno gimnasio, rodeados de gente que se preocupa por su salud mientras nosotros nos damos tortazos virtuales con el único esfuerzo de nuestros pulgares. Lo que no saben estas personas es que nuestro entrenamiento superior nos permite salvar el mundo, mientras ellos como mucho, queman la hamburguesa de anoche.

Además nadie puede superar nuestras proezas isquiotibiales al levantarnos una y otra vez del sillón a prender la consola, correr la tele, mover el cable, soplar el cartucho, reconectar el joystick, cambiar las pilas, encontrar el control remoto, servirnos un vaso de gaseosa… pff, que ejercicio el de ser gamer.

¿En qué estaba? Ah sí, ayer fuímos a la presentación de UFC 2, organizada por EA y LocalStrike en el medio de una de las sedes de SportClub. No es una expresión, eh: fue en el medio. Mientras las señoras en la cinta corrían mirándonos y pensando “voy a tener una larga charla con mi hijo esta noche para que no me salga así”, nosotros disfrutábamos de almohaditas de avena y bebidas Powerade, un lindo mimo a la prensa que estaba ahí para probar el tan esperado juego que se presentaba.

Hicimos lo que todo gamer que se precie haría, por supuesto: sacarnos fotos con la figura de cartón de Ronda Rousey, y también con el otro pibe que aparece en la tapa. Además de poder probar el juego, se armó un torneo en el que nos disputamos, entre todos los cronistas, el cinturón del campeonato. De más está decir que no pasamos de la primera ronda (¡y eso que teníamos dos participantes!).

Entre los presentes, se encontraba nada más que Nazareno Casero (el hijo de Batman) al que quien les habla tuvo la sutileza de no reconocer en la entrada y preguntarle de qué medio venía. Narazeno llegó a la final pero fue vencido en la última contienda, aunque supo tomarse su derrota con humor.

Sobre el juego: nos gustó, pero no se preocupen, vamos a analizarlo en detalle en la review que ya está a punto de salir del horno. En resumen, pasamos una tarde amena con colegas y le demostramos al resto del gimnasio que la polenta la tenemos nosotros. Con queso y salsa. En el estómago. [i]

Por cierto, las fotos las sacó Cufa.