Cuando terminaba el siglo 19 la humanidad temía que de ahí no pasara, y cada vez que aparecía un cometa todos pensaban que era el fin. Y como todo es un ciclo eterno, cuando el siglo 20 terminaba, no hace mucho, hubo como un miedo atroz y mundial sobre qué demonios pasaría en el minuto cero del nuevo milenio. Pero esta vez el miedo no era por rocas espaciales, profetas locos ni supersticiones. Específicamente, todos estábamos asustados por… las computadoras. Los primeros programadores no habían tenido la fe ni la previsión ni la potencia de almacenamiento para dotar a los sistemas con fechas que contemplaran los cuatro dígitos del año. De ese modo, el año 2000 iba a ser interpretado por las máquinas como 1900, ya que los programas asumían que estaban trabajando en el siglo 20.
Se venía una ola de desastres: las máquinas se confundirían tanto que caerían aviones, pararían los hospitales, la bolsa se derrumbaría y un sinfin de problemas mayores. ¡Era la extinción! Aprovechando ese caos, miles de artistas se lanzaron a crear historias que tuvieran un componente profético y relacionado con el milenio, los ciclos de la historia y la continuidad de la raza humana. Chris Carter, el creador de Los Expedientes Secretos X, fue el autor de esa maravilla de la televisión llamada Millennium y protagonizada por Lance Henriksen en el rol de Frank Black, un viejo de mirada turbia y rostro anguloso. Frank, aunque no era un psíquico, tenía el poder de ver la realidad a través de los ojos de asesinos seriales y otros bichos. Y poco a poco se ve envuelto en los siniestros planes de una organización así misma llamada The Millennium Group. Frank comienza resolviendo simples crímenes pero va cayendo en un gigantesco agujero repleto de enigmas y de horrores. La serie tuvo tres temporadas y se emitió por la red Fox desde 1996 a 1999, como para sellar el efecto del final de milenio. Es una cosa digna de verse por cualquier fanático de la ciencia-ficción, la fantasía y las conspiraciones. Millennium y sus protagonistas supieron ganar diversos premios, incluyendo mejor guión y excepcional desempeño en calidad para una serie de TV otorgada por la Sociedad Americana de Cinematografía.