Lágrimas de alto voltaje.
Hay algo fantástico en este juego, y es de lo primero que voy a hablar. La historia de Teslagrad no está contada con palabras, y sin embargo se entiende lo más bien. No hay un solo vocablo más que en los menús. En Teslagrad, una imagen vale más que mil palabras, pero también una decisión artística, un cambio de compás en la música, un objeto, una marca en la pared.
La gran protagonista de Teslagrad es la electricidad, por supuesto. Todos los espacios y nuestra progresión en ellos están signados por esta maravillosa fuerza. Y de su mano, entra en escena el magnetismo, que no sólo se aplica en las mecánicas de juego, sino en la historia. Porque el trasfondo de Teslagrad, los hechos que se nos cuentan de manera indirecta a medida que exploramos esa misteriosa torre, tiene que ver con la atracción y con el rechazo, con dos fuerzas que se juntaron por un bien común, para distanciarse luego por sus diferencias.
Si se ponen a leer info por ahí, incluso en el propio sitio del juego, se van a enterar más o menos de todo. Yo prefiero que lo jueguen sin saber demasiado. Lo que si les puedo decir es que es una historia sencilla, pero no menos profunda, épica y algo triste. Que la estética de todo el conjunto es algo retro y steampunk, muy colorida y visualmente atrapante.
La estructura del juego es la de un metroidvania, aunque lo que detiene nuestro progreso, más que enemigos feroces por atacarnos, es la electricidad que abunda por todas partes, dispuesta a freírnos. Para abrirnos paso, tendremos que dominarla, con una buena combinación de artilugios que iremos encontrando y mucho ingenio. La tecnología dispersa por la torre nos irá vistiendo, y ganaremos la habilidad de atravesar objetos o crear campos de fuerza.
Los puzzles consisten en utilizar nuestras habilidades para atravesar corrientes peligrosas, o invertir la polaridad de ciertos imanes para generar atracción y rechazo en la medida que nos convenga. Estas mecánicas, en apariencia complejas, están muy bien pulidas y resultan intuitivas, al menos en la gran mayoría de los casos, con la excepción de algún que otro puzzle que podría haberse perfeccionado.
Otro gran logro de Teslagrad son los bosses. A excepción de los bosses humanos, que son metódicos y repetitivos (pero ejecutados, aun así, con maestría), los villanos mecánicos son los más terroríficos y desafiantes. La clave es que todos hacen buen uso de las particulares mecánicas del juego.
La versión de Wii U no aporta una gran diferencia a las otras, pero permite usar el gamepad de mapa y de inventario de pergaminos, lo cual nos evita el tener que pausar el juego para consultar ambos. Trae la posibilidad, además, de jugar en el gamepad sin la TV de por medio, lo cual siempre es bienvenido,
Y sí, dije inventario de pergaminos porque eso es el único coleccionable que nos encontraremos en nuestras aventuras. Unos hermosos rollos bien escondidos a lo largo del juego, que nos contarán aún más acerca del universo de Teslagrad. Coleccionarlos todos nos abrirá las puertas, incluso, a un final extra.
Es en el momento final donde veremos el único vocablo, la única combinación de letras que Teslagrad se atreve a mostrar. Dorada sobre el cielo, escrita en una fuente rúnica, la palabra “ENDE”. [i]
DESARROLLO: Rain Games
DISTRIBUCIÓN: Rain Games
GENERO: Plataformas, Puzzles
PLATAFORMA: Wii U, PC, Mac, Linux
CALIFICACIÓN
90%
QUÉ ONDA: Plataformero con estilo metroidvania, resolveremos puzzles que utilizan electricidad y magnetismo. Destinado a convertirse en un clásico de la escena indie. “F***in’ magnets, how do they work?”
LO BUENO: Gran aspecto visual, una historia emotiva sin palabras, desafiante, rejugable. Es breve (¡yey!).
LO MALO: La dificultad de algunos puzzles puede resultar frustante, en parte por su abuso de las mecánicas. El mapa no es muy claro. Es breve (¡uhh!).

Santiago Figueroa, alias Morton, fue durante unos años el Jefe de Redacción de [IRROMPIBLES]. Ahora es padre y vive en otro continente. Es fan de Sonic. También sabe hacer juegos y pelis. Pueden ver sus locuras en YouTube, o por Twitch, o vigilarlo por Twitter como @aliasmorton.