Un fichín argentino de verdad espectacular.
La pantalla tiembla y del cielo caen clonocélulas, una tormenta de bloques de color, un nene muy conocido pasa revoleando hachas, o un fantasma nos persigue, o un dragón intenta quemarnos el trasero, o una esfera gigante…
Juanito era un pendex que fichineaba sin parar (dicen que su papá era súper fichinero) hasta que, una noche, una invasión alienígena en forma de virus informático se metió en su computadora.
De ahí en más, y con la ayuda de su amigote (también un extraterrestre) debe salvar a sus videojuegos favoritos (que, bah, son los videojuegos favoritos de cualquier irrompible).
Para tan honorable misión, el alien lo reduce con su pistola loca y lo «mete» dentro de la PC. Adentro, cae sin parar una lluvia de «clonocélulas», una más maligna que otra, que si no las reventamos se ponen a rebotar por todas partes. Y caen más cosas, por supuesto.
Juanito es un arcade fenomenal, repleto de simpatía, varidad, color y nostalgia ochentosa, porque los fichines que Juanito salva son muchos de los más grandes clásicos de la era dorada de los videojuegos: Tetris, Adventure Island, Breakout, Snow Bros, Pac-Man, Kung Fu Master, Donkey Kong, Pong y uno secreto. Pero se trata de variaciones inspiradas en ellos, porque Juanito tiene su propio estilo de juego.
El pequeño héroe dispara hacia arriba y se mueve de izquierda a derecha solamente. La onda es destruir y esquivar frenéticamente las clonocélulas -entre otros peligros-, que van cayendo desde el cielo en diferentes patrones y con grandes variaciones: las hay que se rompen de un solo tiro, otras que se dividen en clonocélulas más chicas, otras tienen caparazón, y hay otras horribles que son durísimas de romper, disparan o dejan trampas, o pasa todo eso junto.
Se extraña la posibilidad de saltar, al menos en los primeros momentos del juego, después uno se acostumbra. Es posible «derrapar» cierta distancia, y esa técnica rápida de esquivar es imprescindible para no comerse una clonocélula asesina. ¡Imposible terminar Juanito sin dominar el arte del derrape!
Los capítulos del juego se desbloquean al juntar cierta cantidad de estrellas, y cada nivel deja ganar hasta tres; esto permite que aunque no los terminemos perfectos, podamos desbloquear el siguiente capítulo.
Cada capítulo tiene nueve niveles y un «nivel X» súper desafiante, donde no faltan las celebridades, como en el caso del nivel de Tetris, donde un simio parecido a Donkey Kong se cuelga de la famosa torre rusa de Tetris, cae al suelo, se golpea el pecho y da paso a un cielo que se desarma en bloques por encima del sufrido Juanito.
Otro elemento simpático son las frutas, tartas, pretzels, empanadas y alfajores que sueltan las clonocélulas al ser destruidas. No faltan las vidas extras y los power ups, que duran un ratito pero permiten destrucción masiva, disparar en arco, y así.
La dificultad de Juanito está muy bien lograda, y va de fácil a condenadamente difícil. Por momentos, con docenas de clonocélulas de distinto tipo rebotando por toda la pantalla, se parece a un «bullet hell» asiático de esos donde la coordinación y la serenidad son cruciales para no morder el piso.
En esencia, Juanito Arcade Mayhem vale cada centavo (y ni siquiera es caro para la alegría que ofrece). Lo consiguen ya mismo en Steam. ¡Háganlo!: además de ser hiper divertido y desafiante, fue desarrollado por los argentinos de Game Ever Studio, con el tandilense Joaquín Ibarlucía a la cabeza, junto a muchos otros tipos geniales. Merecen que los apoyemos luego de dedicarle cuatro años a Juanito.
La animación es excelente, y la música acompaña muy bien. Además, no faltan logros para ganar, tres modos de dificultad, un modo de supervivencia impresionante (donde se van mezclando todos los escenarios y enemigos, y que además se puede jugar de a dos) y una buena cantidad de extras.
Muy orgullosos en [i] porque Game Ever haya logrado hacer de Juanito uno de los mejores arcades argentinos. ¡Felicitades para ellos y que vengan muchos más! [i]
- DESARROLLADO Y DISTRiBUIDO POR: Game Ever Studio / Steam
- GÉNERO: Arcade
- PLATAFORMAS: PC
CALIFICACIÓN
85%
QUÉ ONDA: Un arcade rebosante de variedad y nostalgia ochentera. ¡De los mejor hecho en Argentina!
LO BUENO: La acción es frenética y resulta muy agradable de jugar. Gameplay, animación y música, hermosos. Técnicamente impecable.
LO MALO: Juanito no puede saltar (aunque uno se acostumbra).