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Sid Meier’s Civilization VI: Gathering Storm [REVIEW]

Rayos y centellas a través del tiempo

El Acuerdo de París. En el marco de la ONU, este pacto marcó el momento en el que el mundo se empezó a tomar seriamente el cambio climático. Con el objetivo de mantener el aumento de la temperatura media global a 1.5°C mediante la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero, se está reestructurando el panorama político y económico respecto a esta crisis. Ahora bien ¿Qué pasaría si dejamos que se pudra todo? ¿Hay un beneficio a esto? ¿Por qué recórcholis Donald Trump dice que esto es un invento de los chinos? Nuestra teoría: quiere construir un robot gigante para sacar la victoria por dominación.

Hace casi 30 años que Sid Meier es un nombre con peso en los juegos de estrategia. Desde el stack de la muerte hasta #OneMoreTurn o el holocausto nuclear de Ghandi, es innegable que Civilization, a pesar de constituir un nicho en el género de estrategia, es un juego del que hasta quienes no son fanáticos constructores de imperios conocen.

En la última década la franquicia tuvo una explosión de popularidad con Civilization V cuando, entre otras, cosas se cambió la clásica grilla cuadrada a una grilla hexagonal. Hoy en día, Civilization VI encabeza la franquicia. Con algunas cosas que los fans no comparten, pero un gran énfasis en la estética, esta entrega continúa la tendencia del anterior de tener DLCs chicos por lo general de civilizaciones nuevas para jugar acompañados por una o dos expansiones grandes. Civilization VI: Gathering Storm es la última hasta la fecha, que como su predecesor (Rise and Fall) trae nuevos sistemas que cambian radicalmente la experiencia ¿Es así? Pronto lo sabrán.

Como en la expansión anterior, acá hay una mecánica principal que guía el gameplay: desastres naturales. Utilizando cosas que ya estaban en el juego y agregando algunas nuevas, los jugadores vamos a tener que tomar conciencia de cómo nuestras acciones impactan el medio ambiente y, de la misma, manera vamos a poder explotar esas situaciones a nuestro favor. Estos desastres vienen en varias formas: tormentas, inundaciones, sequías, erupciones volcánicas y accidentes nucleares, que son los únicos causados exclusivamente por nosotros.

Otro de los factores que vamos a tener que vigilar es el tan polémico calentamiento global. Vamos a disponer de una pantalla que regula las emisiones globales y locales de dióxido de carbono, y según como estén nos va a situar en un nivel de cambio climático de 0 a 7. A medida que los niveles vayan subiendo, los desastres se van a volver más frecuentes; y no sólo eso, sino que debido al derretimiento de los polos el nivel del mar va a subir inundando casilleros permanentemente.

Hay varias maneras en las que podemos mejorar o empeorar la situación. Cuando nuestra civilización se inclina por la tala y el uso de combustibles fósiles, los efectos del clima se acentúan como en la vida real. Cuando la hecatombe venga vamos a tener que remendar el daño y construir barreras de inundación, además de arreglar nuestros reactores nucleares si no queremos accidentes. Para quienes tomen un camino más “eco-friendly” hay políticas y opciones de energía más ecológicas, pero que hacen el éxito industrial un poco más complicado de conseguir.

Mantener nuestra nación funcionando no sólo requiere de suplir de energía a las fábricas y evitar que estas terminen bajo el agua o las cenizas de un volcán, ahora la diplomacia también se vuelve un factor importante. Para cumplir eso, volviendo de Civilization V, está de vuelta el congreso mundial. Esta imitación de la ONU se junta periódicamente para votar tratados que pueden inclinar la balanza en nuestras partidas. De la misma manera que votamos esos tratados, las emergencias internacionales de la expansión anterior ahora se tratan con una votación previa. El éxito que tengamos en este ejercicio dependerá de nuestros puntos diplomáticos, moneda nueva que se consigue principalmente haciendo intercambios con otras naciones, modernizando nuestras formas de gobierno, forjando alianzas o apadrinando naciones-estado. Es posible también apretar a tus oponentes mediante fuerza militar, pero no esperen que estén tan dispuestos a darte su favor.

Si logramos dominar el arte de las relaciones públicas, más adelante vamos a poder votar para darle puntos de victoria diplomática a quien consideremos más apropiado (nosotros por supuesto) o quitárselos a quien no. El primero que acumule 10, como Roberto Carlos, gana la victoria diplomática por tener un millón de amigos.

Hablando de afianzar amistades, hablemos de las cosas que les van a gustar a todos: más contenido. Gathering Storm viene con un puñado de maravillas nuevas y interesante, entre ellas el Golden Gate Bridge y el Canal de Panamá. Este último acompaña la nueva mecánica de construir distritos de canal, una mecánica adorada por los fans, que antaño sólo se podía lograr si fundábamos una ciudad en un casillero entre dos cuerpos de agua. Además de esta obra de infraestructura, también vamos a poder construir ferrocarriles, represas, barrios sobre el mar y las anteriormente mencionadas barreras de inundación para poder torcer la naturaleza a nuestra voluntad.

Para quienes se quejan de que 200 turnos es muy poco tiempo para una partida, la expansión también trae nuevas tecnologías y cívicas del futuro cercano. Desde inteligencia artificial y colonización de planetas hasta post-verdad y gobiernos digitales, estos nuevos avances también tienen tres nuevos tipos de gobierno tan utópicos o distópicos como uno los quiera interpretar: Democracia Digital, Tecnocracia Sintética y Libertarianismo Corporativo. Si las partidas largas no son lo suyo, hay dos nuevos escenarios con reglas especiales: La Muerte Negra (sobre la peste negra) y Máquina de Guerra (sobre la 1ra Guerra Mundial).

Y ahora la frutilla del postre: los nuevos líderes. Como es costumbre los nuevos líderes están diseñados alrededor de las nuevas mecánicas pero en esta entrega tienen un enfoque no tan obvio, más general y ciertamente bastante interesante. De los que más nos gustaron sacamos a Eleanor de Aquitane, que tiene la característica especial de ser compartida por Francia y Inglaterra con las mismas habilidades, y Kupe, líder Maori con una gran ventaja en mapas de islas que empieza en el océano.

Es muy complicado cubrir todo lo que trae la nueva expansión por lo largo y complejo de las partidas, pero eso no quita el hecho de que casi todo lo que Civilization VI: Gathering Storm trae es positivo. Si sintieron que los mapas del V eran poco interactivos, ahora van a estar contentos sabiendo que pueden usar un volcán activo en combate contra tus enemigos. Si las locuras no son lo suto, y en cambio prefieren el avance tecnológico y la diplomacia, también van a encontrar mucho para entretenerse.

La realidad es que por fuera de quienes puedan encontrar este género monótono o muy tedioso, Firaxis sabe perfectamente lo que hace. Sin mencionar que al día de hoy el juego sigue siendo actualizado incorporando el feedback de quienes jugamos, claramente no están perdiendo nada al conseguir esta expansión. De todos modos les recomendamos jugarse una partidita para sacarse la duda. No es que un par de turnos se conviertan en una trasnochada así como así ¿No? [i]


DESARROLLADO POR: Firaxis Games
DISTRIBUIDO POR: 2K
GÉNERO: Estrategia
DISPONIBLE EN: Windows, Mac, Linux

QUÉ ONDA: Desastres naturales y complejidad política se apoderan de esta nueva expansión ¿Vamos a ser un gobernante eco-friendly o utilizaremos el calentamiento global como un arma?
LO BUENO: Toneladas de nuevo contenido y interacciones nuevas con los mapas en los que jugamos
LO MALO: El juego todavía no deja de sentirse muy largo, más aún con todo lo nuevo para hacer.

Este análisis fue realizado a través de un código de PC provisto por sus desarrolladores.

  • CALIFICACIÓN90%
90%

Un Comentario

  1. Muy buena nota.
    Recuerdo que la mecánica de calentamiento global, que comia casilleros(con ellos ciudades ó lo que hubiera). Ya existía en el Civilization: Call To Power.

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