Logitech G715 [REVIEW]

Tecleando desde las nubes me convertí en panqueque

Reconozco que adoro probar periféricos. Ver las distintas cajas, sus colores, la confección y los materiales de los empaques con ese inconfundible olor a nuevo son una de las tareas que más disfruto. No hay nada como esa primera experiencia con un dispositivo, entender sus fortalezas y debilidades en una búsqueda implacable por saber cuál es mejor, evitándoles a todos ustedes una mala inversión. Pero dentro de ese universo, admito que el objeto que menos curiosidad me da es un teclado, porque no hay grandes diferencias o mucho por decir. Hasta que llegó Logitech G715 Aurora, me hizo cambiar de opinión y me convirtió en un panqueque.

Un atractivo irresistible que derriba prejuicios

Con solo sostener la caja, sentí que este teclado podría ser una sorpresa. La confección es súper premium y va con los tapones de punta a un segmento en el que los empaques intentan ser cada vez más sencillos. Una caja muy llamativa, en la que predomina el blanco y los colores pastel, invita a descubrir un teclado cuidadosamente envuelto en papel, presentándose casi como un regalo tecnológico. Mientras lo abría en estado casi hipnótico, no podía dejar de pensar que esta nueva creación de Logitech se convertiría en la oveja blanca del setup.

En un universo en el que reina el negro como color dominante y la pincelada de color descansa en los estridentes RGB, el G715 se presenta completamente opuesto. El teclado es blanco, con esquinas redondeadas y con tonos apastelados, formando parte del nuevo ecosistema Aurora. Esta línea lleva unos meses en otros países, y fue abrazada cariñosamente por los gamers que buscaban algo distinto. El resto de los integrantes de la línea, el mouse G705 y el headset G735, acompañan con el mismo diseño llamativo, que contra mi voluntad ya se estaba instalando en algún rincón de mi cerebro.

Tecleando desde las nubes de G715

Acostumbrado a sólidos teclados de acero negro, sentí una curiosidad instantánea por uno que parecía casi un juguete. En esta propuesta TKL de Logitech, predomina el plástico. Ofrece botones para controlar la intensidad de la iluminación, para bloquear teclas mientras estamos jugando y para sincronizar con la PC. Tiene también controles multimedia y una rueda para subir o bajar el volumen, algo que me pareció ridículamente atractivo y útil.

El teclado utiliza la tecnología LightSpeed para lograr la mejor velocidad de comunicación a través de un pequeño dongle, pero también puede conectarse vía bluetooth a una PC o a cualquier otro dispositivo. La batería dura unas 30 horas aproximadamente, pero puede extender su autonomía según la iluminación que elijamos. En la parte trasera tiene un puerto usb tipo C para carga, que nos permite seguir trabajando o jugando como ocurre con cualquier otro teclado mientras le inyectamos energía para el próximo ciclo.

Los switches elegidos para acompañar nuestras horas de juego en este teclado son los Long Hua Brown. Estos interruptores fabricados por Kailh quizás no sean los más precisos para gaming, pero son súper efectivos y mucho más silenciosos. 

La nubecita, la luz y muchas posibilidades de configuración

El teclado que a simple vista resulta atractivo, se convierte en un objeto increíble cuando hablamos de customización. Por empezar, el frente del teclado es removible sin demasiado esfuerzo. La delicada pieza de plástico está apoyada sobre el teclado y firme gracias a nueve pequeños imanes, y puede intercambiarse con facilidad por otra de color. Por el momento no hay en stock, pero pronto tendremos disponibles opciones en rosa y verde pastel.

En cuanto a la configuración de luz, mediante la completísima aplicación G Hub, el G715 ofrece un abanico enorme de opciones. Podemos cambiar los efectos y animaciones de luz, elegir colores e incluso alterar la intensidad o la saturación. Los colores pueden ser tan estridentes o apastelados como se nos ocurra, y si nos ponemos en detallistas, es posible cambiar colores tecla por tecla.

Pero la línea Aurora va un paso más allá en cuanto a estética, y suma a la iluminación de cada switch una tira de luz que rodea toda la base del teclado. El efecto que produce el G715 a la vista es maravilloso y es imposible no rendirse a sus teclas. Para completar este combo irresistible, dentro de la caja viene un reposa-manos, en forma de nube, para descansar las muñecas. Es increíblemente cómodo y, al no estar fijo, puede acomodarse a gusto. Resulta de gran utilidad pese a su jugada propuesta estética. 

Logitech G715, el elegido por los profesionales de esports

Toda la resistencia emocional que podamos tener hacia un dispositivo, se desintegra cuando lo vemos en manos de talentosos jugadores de esports. Siempre me resistí a romper mi setup habitual, con periféricos de un mismo color y marca, hasta que lo vi en manos de un jugador de Virtus Pro. Para quienes no están “en la pomada” de los esports, el roster de CS:GO de este equipo es el número 10 en el mundo, y vino a competir hace muy poco al país en la FiReLEAGUE BATTLE. Al ver el teclado en manos profesionales funcionando como una maquinaria perfecta, me rendí. Si lo usa uno de los mejores del mundo, tengo que tenerlo.

Logitech G715 y un único “PERO”

Todos los objetos tienen su punto negativo. En el caso del G715, a nivel construcción y propuesta estética, realmente no hay nada que decir. Es un producto que entra por los ojos y no defrauda a nivel prestaciones. Esto nos deja con un único “pero”, que es el precio.

En las tiendas oficiales de USA puede conseguirse por 200 dolarucos y, en Argentina, en un rango que va de 166 a 185 mil pesos. Es una cifra importante para un teclado y somos nosotros los únicos capaces de evaluar si vale la pena matar al cocodrilo de nuestra billetera para darnos ese gustito. ¿Hay teclados más económicos? Por supuesto que sí, pero Logitech lo sabe y es por esta razón que apuntan a resolver con estilo varias cosas en un solo producto. Comodidad, conectividad, customización y un diseño audaz.

En mi caso, el G715 Aurora logró algo que ninguno había conseguido hasta el momento, hacerme superar el TOC de tener un setup completo de una marca. Pese a todos los prejuicios y manías, abracé la idea de teclear desde las nubes y me convertí en panqueque, con la esperanza de tener el 10 % del talento de un pro player y el teclado más canchero del mercado. [i]

Este análisis de Logitech G715 Aurora fue realizado con un ejemplar provisto por Logitech.