Informes

Marbella Vice: el banquete se termina, ¡pero nos queda Mascarpone!

Marbella Vice está a nada de cumplir dos meses desde su exitoso estreno pero, a pesar de ello, también de cerrar su primera temporada. No, no estamos hablando de una serie de Netflix, sino el servidor de “GTA roleplay” de Ibai Llanos.

En él, reunió a más de 150 streamers, youtubers y celebridades, desde periodistas hasta futbolistas de los más reconocidos. El servidor dio lugar a mil situaciones cómicas y disparatadas, pero la pregunta que nos hacemos es: ¿Qué nos deja esta experiencia?

Antes de continuar, seguro que muchos piensan en “GTA rol” como una variedad de sushi. Y está bien, porque aun cuando la experiencia tiene bastante tiempo, todavía no es algo súper popular. Tal vez sí escucharon el término, pero de pasada, sin mucha idea de qué va la cosa. Si bien esta nota no apunta a explicar en profundidad esta movida —sino de los talentos que produce— es necesario dar un contexto adecuado.

Para definirlo de manera sencilla: imaginen GTA V online —sí, el videojuego— transformado en un gran set de televisión. Es decir, no juegan a la manera clásica, sino que cada jugador crea un avatar virtual y se meten en la piel de un personaje.

Tal como si fuera una obra de teatro o cine, actúan y desarrollan su personalidad de la forma más realista y coherente posible. Es decir, rolean problemas, actividades y relaciones con un planteo cercano al MMORPG, pero con menos calabozos (y ningún dragón). Algo así como una “segunda vida”, con la ventaja de que allí dentro no hay COVID.

Además de interactuar con otros “actores” y construir entre todos la persistencia del mundo, deben ganar dinero, preocuparse por su alimentación y mucho más. Todo esto bajo una gran cantidad de reglas estrictas, que preservan cierto orden y realismo en esta suerte de “representación masiva”.  Incumplir estas normas básicas puede terminar en una suspensión o directamente una patada en el traste y ser echado del server.

Un vicio llamado Marbella

Pasando al terreno personal, admito que —pese a que no concibo la vida sin YouTube— nunca fui gran consumidor de Twtich. Me choca el elevado histrionismo que (en principio) parece inherente al formato. 

Por supuesto, no es un ataque a los creadores de contenido de esta plataforma, simplemente una cuestión de gusto personal. Las razones se entienden perfectamente: no es fácil captar la atención de potenciales seguidores entre una descomunal oferta de contenido.

Además, no sumaban demasiado las actitudes negativas de parte de algunos (¿varios?) exponentes del medio. Por supuesto, admito que es mala mía por generalizar y no bucear un poco más en la oferta de la plataforma, tratando de encontrar algo que me cierre.

Por ello, el contraste con lo que pude ver en Marbella Vice fue la noche y el día. Gente que destaca por su calidez, humildad y un talento fuera de lo común ¡Grandes descubrimientos! 

De manera que, en lo personal, estoy obligado a recomendarles un grupo increíble, que ojalá siga unido en otros proyectos. En solitario son muy buenos, pero juntos son geniales, en especial cuando orbitan alrededor de un astro español llamado Borja Pavón.

¡Apuntaaa!

Quizás no sea muy conocido en Argentina por nombre y apellido, pero es probable que tengan a Borja por su trabajo en Eurogamer España (quizás el mejor sitio de periodismo de videojuegos en español). Allí hace una excepcional labor con un equipo fantástico, entre los cuales se encuentra el bestial Enrique Alonso. Este tipo es tan bueno que, el día que Woody Allen aprenda español y vea un video guionado por él, no tarda en contratarlo para que le dé clases. Claro que, ahora que pienso, se tienen que dar demasiadas condiciones… Enroque, si estás leyendo: perdón, no te quise ilusionar al pedo.

Volviendo al tema, los años de trayectoria de Borja Pavón —ya sea como periodista o como creador de contenido— hacen que hablar de “revelación” sea faltarle el respeto. Pese a ello, estaba acostumbrado a disfrutar de sus trabajos guionados, motivo por el cual su capacidad de improvisación y rapidez fueron gratísimas sorpresas.

Así, con esas afiladas herramientas, rolea un personaje llamado “Rodolfo Mascarpone”, quién carga con una historia tan desopilante como dramática. Una historia a la cual lamento no poder hacerle justicia por tener que resumirla, pensando en que leer esta nota no les lleve una semana.

Aún así, haré mi mejor intento: hace tiempo, Rodolfo y su pareja administraban un bar de moteros en Córcega, la isla francesa. Los fines de semana, el joven Mascarpone impactaba a todos los parroquianos con su número de pole dancing. Aunque es posible que ese impacto no haya sido muy positivo…

Ocurrió que, según reza la mitología Mascarpónica (previa a Marbella Vice), luego de algunos años felices, la tragedia tocó a la puerta de la pareja. Los motoqueros (¿quizás cansados de su aparatoso baile sensual?) prendieron fuego a su bar y el amor de su vida murió en este incendio.

A causa de esto, hoy Rodolfo vaga como una (muy borracha) alma en pena. Cada vez que puede, evade la realidad con un cóctel explosivo: una parte de whiskey, una parte de hermosa locura.

Así, Borja pinta al personaje con los colores de un “payasito triste”, metiendo pinceladas dramáticas entre tanta comedia desopilante. Imaginen “Leaving Las Vegas”, pero protagonizada por los Monty Python.

SIMBA

Durante el tiempo que lleva Marbella Vice, pasé de no darle bola a Twitch a ver las transmisiones de Borja en familiaClaro, es necesario aclarar que —pese a que estas transmisiones tienen restricción de edad— Rodolfo Mascarpone maneja un humor bastante inocente y “blanco. La prueba está en que mi hija de once años, como muchos otros niños, lo disfruta riendo como condenada. Por otra parte, también ayuda que Borja, como manifestó muchas veces, no se siente cómodo con los roles “sexuales”.

Por ello, una de las primeras cosas que su alter ego aclara es que “no le va lo sessual”. De esta forma, se despega todavía más del chiste fácil, chabacano y de los roles “calenturientos que abundan.

¿Y qué pasa si está solo, sin otro “jugador” haciéndole compañía en Marbella Vice? ¡No es un problema! Se pone a generar situtaciones con los “personajes no jugadores” (aquellos controlados por el juego). Les pone su propia voz y comienza a rolear con ellos. ¿Se entiende? ¡A este tipo le sobra para ser actor principal, secundario y extra! 

No es extraño verlo interactuar y mantener diálogos con otros personajes —a veces hasta más de uno a la vez— cuando, en realidad… ¡son él mismo! Borja Pavón hace de la esquizofrenia un arte y la retuerce hasta exprimir genialidad pura.

Hay equipo

Por otra parte, Borja se para en el extremo opuesto de cualquier actitud del tipo “estrellita”. Realmente es para destacar, porque tiene la rapidez, picardía, sentido de la oportunidad y calidad para definir como el mejor “9 de área”. Pero es un goleador generoso, siempre.

Sin duda, en Marbella Vice su talento y calidez es un faro para acercar gente en la misma sintonía. Así, se formó un equipo que juega “a los toques” y define partidos como nadie. Cuando está acompañado, Borja retrocede en la cancha, da lugar al resto y arma juego para que sus compañeros también brillen. Se retroalimentan generando situaciones que podrían asfixiar de la risa al más amargo. Ahora bien, ¿quiénes son estos jugadores de primera?

Presentando a la banda

Vamos a comenzar con dos personajes de Marbella Vice, que son el angelito y el diablillo susurrando en los oídos de Rodolfo. Por un lado, la tierna serafina llamada Dahlia (AKA Tulipán), protagonizada por Nori. Ella es muy maternal con Rodolfo aunque… bueno, digamos que hay un Edipo complicado en esa relación. Y, pese a ser la más centrada, cuando se saca de quicio se pone violenta como un vikingo en modo berserker.

Luego tenemos la diablilla, Katya (Katy), protagonizada por Eli. Una rusa completamente loca y desquiciada, que no para un segundo y que marea hasta el propio Rodolfo (que ya es decir mucho). Pese a sus 19 años y su aspecto tierno en la vida real, Eli es una máquina de aflojar vejigas a pura risa.

Por otra parte —cartel “Parental Advisory” mediante— tenemos a la “Tita Isabel”. Una señora mayor que acusa cuarenta años, pero al mismo tiempo declara que hace veinte que dejó de contar. Una máquina calenturienta guarra como ella sola— que está atravesando una segunda y tardía pubertad. Pese a repetir “coño” y “polla” cada treinta segundos, su creador (el genial Tae) exprime todo el humor inteligente y picante de su personaje.

Un caso aparte es Carola, una bestia descomunal del roleplay. No solo desarrolla su personaje principal, un ruso mafioso llamado Fedor, sino que arma las tramas para el resto de los participantes del servidor. También, pone en marcha “misiones”, donde genera escenas y actividades especiales, metiendo a los participantes en una película en tiempo real. Tiene una capacidad realmente INCREÍBLE, no se pueden perder el trabajo de esta mente maestra.

Para terminar, el plato fuerte: el personaje que hoy por hoy es el mejor compañero de aventuras de Rodolfo: Ramón Cazanuecos, interpretado por The Catacroquer. Es dueño del mítico bar “El Molinillo”, lugar que usa como base de operaciones para planear actividades y negocios un poco… turbios. Cuando Borja y “El Cata” se juntan, comienzan a escucharse resoplidos en el micrófono, producto de sus risas casi imposibles de contener. Desopilante es poco y el talento del Catacroquer, para las voces y la improvisación, es demencial.

¡Que alguien llame a alguien!

¿Acaso hay algo más energizante y curativo que la risa? Más con la falta que nos hace en estos tiempos, donde la realidad no afloja los golpes. Por eso, además de cubrir esta noticia relacionada con el gaming, queríamos aportar nuestro granito de arena para difundir el talento de esta gente. Y, en especial, para que ustedes los conozcan y los disfruten. “¡Que alguien llame a alguien!” es una frase y un pedido bastante recurrente en el borjiverso. Ojalá que consigamos llegar y llamar a unos cuantos, acercarlos a esta movida y que, principalmente, se alegren un buen rato. [i]


NOTA: en los nombres de cada creador de contenido está el enlace a su perfil de Twitter. En los nombres de su personaje, el enlace a su canal de Twitch.

Un Comentario

Escribe un comentario