Reviews

Fe [REVIEW]

Un Stitch “segunda marca”

Aprovechamos la (muy) tardía salida en la store argentina de Nintendo para analizar Fe. Una aventura plataformera 3D y en tercera persona, que se suma a la lista de juegos con climas marcados —muchas veces opresivos o solitarios— y narrativas minimalistas. Estamos hablando de Limbo, Inside o Journey, por mencionar algunos ejemplos. Es probable que, de todas las formas posibles de contar una historia en un videojuego, sea este el estilo más complejo. ¿Saldrá victorioso?

Una simpática — aunque algo darky— y cantarina criatura alienígena aterriza en medio de un bosque. Luego del porrazo, se despabila y, algo tímida, comienza a efectuar un reconocimiento del terreno. En este frondoso bosque se mezclan zonas coloridas y luminosas con parajes sacados de una película de terror. Para todos los gustos.

De repente, se topa con el primer ser vivo, una especie de ciervo. Nuestro alien intenta comunicarse como le sale mejor: con una especie de cántico que debe sintonizar hasta encontrar la frecuencia correcta que le agrade al primo de Bambi. Así, se forma una conexión, una amistad entre los dos seres. De aquí en más, el animalito lo ayuda en su avance, tanto para habilitar plataformas de salto como para hacer las veces de montura.

Aparecen nuevos animalitos, pajaritos y lagartijas. Con la misma mecánica, sintonizamos nuestro canto hasta formar nuestro lazo de amistad. Cada uno de estos “bichitos” sirve para un propósito, agregando así un sencillo — pero bastante efectivo— componente de puzzle que se vuelve un elemento central del juego. Además, poco a poco vamos descubriendo nuevas habilidades para nuestro Stitch truchelli. Todo es alegría y diversión, hasta que la cosa se pone peluda. Más que peluda, metálica.

FE sing

Yo tengo Fe que el mundo va a cambiar

De pronto, nos encontramos con una nueva especie, pero con ella no hay canción que valga. Son unos espantosos robots, negros, que corren como si fueran arañas. Observamos desde lejos, impotentes, como comienzan a capturar animales con fines siniestros. Pero a no desesperar: hoy nos convertimos en héroes.

Si bien no podemos enfrentarnos directamente a estos seres, tenemos más de una forma de complicar sus planes. Primero que nada, el sigilo. Aprovechando que los arbustos son puntiagudos, muy similares al pelaje de nuestro personaje, podemos usarlos como escondite.

fe robots

También, no tardará mucho hasta que aprendemos a trepar árboles. Esta habilidad no solo nos permite alcanzar nuevas alturas, sino además eludir enemigos en tierra, mientras saltamos de copa en copa.

Por otra parte, haciendo uso de nuestros amigos, algunos muy poderosos, podemos llegar a distraer, dañar e incluso inutilizar a los malvados robots. De esta forma, Fe entra en un círculo de exploración, plataformas y puzzles. Y, mediante el aprendizaje de nuevos “cánticos animales” y habilidades, emprendemos la aventura que implica el rescate de la fauna del lugar.

Y… Si no me tienen Fe…

No saben lo cerca que estamos de recomendarlo con muchas ganas sin poner “peros” en el medio. Es simpático, tierno y no tiene nada que impida que grandes y chicos pueden jugar juntos, sin importar la edad.

Claro que el mayor impedimento radica en que — sin importar si están en primer grado o acaban de jubilarse— la historia es suficientemente críptica y ambigua como para no entender un sorongo cualquiera sea la edad. O sea, entendemos que los robots son malos, nosotros buenos, alguna cosita más y paren de contar.

Por otra parte, se nota una falta de pulido general, en particular (¡justo!) en las mecánicas de plataformas, lo que nos hace suponer que necesitaba un semestre más en el horno. Para rematar, jugando en Nintendo Switch en modo consola, cada tanto pega bajones de cuadros por segundo que nos hacen temer una explosión. Por suerte, ninguna de las dos cosas lo hace injugable, pero sin dudas desmerece la calidad general del producto.

Por poquito

Al terminar la historia principal, se nos abra el mapa y nos ofrecen revistar zonas para conseguir recompensas, antes inaccesibles por falta de alguna habilidad o lenguaje animal. Para esa altura, es posible que ya hayan tenido suficiente. Fe tiene una forma de darnos libertad de exploración que se convierte en un arma de doble filo, ya que es fácil quedarnos trabados sin saber como seguir. Y, si bien existe una función de guía, más de una vez resulta insuficiente. Muchas veces quedamos al borde del embole… y el embole nos devuelve la mirada.

Además de esto, la historia no queda del todo clara. Demasiadas dudas e inconsistencias flotando en el aire. Esta variante narrativa es un riesgo muy grande: si sale bien, pasan a la historia, como Journey o Limbo. En cambio, Fe se queda en el camino como un juego respetable, con muchos aciertos, pero también con elementos debieran estar mejor implementados. Y no, no canta ninguna canción de Elvis. [i]


DESARROLLADO POR: Zoink Games
DISTRIBUIDO POR: Electronic Arts
GÉNERO: Aventura de plataformas
DISPONIBLE EN: PlayStation 4, Xbox One, Nintendo Switch, Microsoft Windows

QUÉ ONDA: Un Stitch fanático de The Cure envuelto en una aventura de plataformas con robots re creepy.
LO BUENO: La estética, ambientación y clima. Nuestro alien es una dulzura. Algunos puzzles son muy copados. La mecánica de sintonización a través del canto.
LO MALO: La mecánica plataformera es un poco rústica. No termina de acertar en la forma o búsqueda narrativa, dejando elementos sueltos incomprensibles.

Este análisis de FE fue realizado a través de un código de Nintendo Switch provisto por sus desarrolladores.

  • CALIFICACIÓN69%
69%

Escribe un comentario