Reviews

KarmaZoo [REVIEW]

Karma camaleón

¡Bienvenidos, aventureros del karma y amantes del cooperativo! Voy a contarles sobre un juego que bien podría haber pasado bajo vuestro radar. En un 2023 plagado de bombas atómicas, el fascinante reino de KarmaZoo bien podría no haber hecho el suficiente ruido. Aun así, es una bella “cañita voladora” en medio de los estruendosos petardos. Pese al aparente entusiasmo que estoy teniendo en vomitar pobres analogías pirotécnicas, piensen en los niños y animalitos y manténgase alejados de la pólvora en estas fiestas. Una review con mensaje social y todo.

KarmaZoo, está desarrollado por Pastagames y publicado por la empresa más cool y con mejor olfato, Devolver Digital. ¿Cómo definirlo? Es un poco difícil. De movida, podemos decir que es un juego de plataformas cooperativo. Pero ocurre que ofrece una experiencia jugable única en el género, de la cual hablaremos un poquito más adelante.

Animales sueltos (pero estos son copados)

Al comienzo, encarnamos a una pequeña masa sin forma, atrapada en el KarmaZoo, una dimensión etérea entre la vida y la muerte. Una suerte de purgatorio, donde tenemos que acumular el suficiente karma positivo para “ir hacia la Luz”. ¿Cómo logramos acumular esta benevolente energía? ¡Nada mejor que ayudar al prójimo!

Así, en perfecta sintonía con la idea anterior, entra la propuesta del cooperativo. Una experiencia disponible para hasta diez jugadores, con la opción (que funciona muy bien) de jugar con personas aleatorias en todo el mundo. O, por supuesto, también con amigos. Sin duda, esta última opción se disfruta más —en especial por las risas—, pero un punto destacable es que, por las propias mecánicas y diseño del juego, resulta en extremo llevadero jugar con desconocidos.

De esta manera, cada partida se conoce como un karma loop”, compuesto por cinco niveles cronometrados. De esta particularidad se desprende otra ventaja: las sesiones de juego son cortas, ya que completar un loop puede llevarnos unos veinte minutos. Pero vayamos a la mecánica central de KarmaZoo, la cual nos exige que nuestro equipo se mantenga unido para completar los niveles con éxito.

Lo anterior es literal: alrededor de nuestro personaje se dibuja un pequeño círculo, el cual representa nuestro “halo” (no, nada que ver con Master Chief). Este elemento nos protege de varios peligros del KarmaZoo y nos permite respawnear. Pero, para asegurar que el halo permanezca activo, debe estar en contacto con el halo de al menos un jugador más, en todo momento. Si esto no ocurre, el círculo disminuye de tamaño hasta desaparecer, dejándonos fuera del presente nivel —en rol de observador— hasta que comience el siguiente desafío. Por supuesto, el juego nos da puntos de karma cuando detecta que hacemos la gran “leave no one behind”, con lo cual el espíritu cooperativo se percibe muy fuerte en cada iteración.

Además, a medida que avanzamos en los niveles durante una partida, los rompecabezas se vuelven más complejos y cooperativos. Desde abrir puertas hasta conectar plataformas móviles y explorar rincones ocultos. Estos son solo algunos de los recursos que KarmaZoo utiliza para fomentar la colaboración entre jugadores.

Otra mecánica que fomenta la “buena onda”, además de ser muy simpática, es que nuestro personaje puede cantar. Esta habilidad es necesaria para activar ciertas plataformas, interruptores y puertas. Un elemento que no solo aporta simpatía, con sonidos peculiares y adorables para cada ser, sino que es original y redondea el clima encantador del juego.

Esta ni siquiera es mi forma final

Mientras acumulamos karma, tenemos una bonita manera de hacer que completar los niveles resulte más atractivo y adorable. Estos puntos se pueden canjear para desbloquear nuevas formas corporales, que nuestra masa informe original puede adoptar. Contamos con más de cincuenta formas diferentes para obtener, que van desde animales como lobos, ranas y leones, hasta objetos como linternas o incluso frutas, como una pera. 

Pero esto último no solo tiene que ver con una cuestión estética. Cada forma tiene una habilidad única que facilita nuestra vida, como también la de nuestros compañeros, tal como dejar una baldosa flotante en el lugar donde morimos. Esta variedad de formas, combinada con la posibilidad de recolectar frutas durante un nivel para desbloquear bonificaciones adicionales, aumenta la variedad en cada una de las partidas. ¿La contrapartida? Desbloquear todas las formas nos llevará una cantidad absurda de horas, con lo cual les recomiendo que primero se informen de las bondades de cada una y enfoquen su grindeo de “buenas voluntades”.

En cuanto a la dificultad, está íntimamente relacionada con la cantidad de jugadores (y que no nos toquen demasiados trasnochados). Dependiendo de esto, el tamaño y desafío de los niveles varían en consonancia. Tenemos centenares de ellos, con distintos rompecabezas y retos a superar, todos diseñados en pos de fomentar la colaboración. Con esto, queda claro que es un juego que puede durar mucho tiempo y brindar gran cantidad de diversión.

En resumen, KarmaZoo es una experiencia cooperativa que brilla por su enorme encanto. Lo probamos en PC, Xbox Series X y PS5, verificando que no solo funciona perfecto en cada plataforma, sino que el juego cruzado es un lujo. Eso sí, una contra es que no tiene modo offline y siempre deben estar conectados. Tiene sentido que así sea, pero no deja de ser un “perno”. Más allá de esto, si están buscando un juego cooperativo, muy divertido y que pueda jugar todo el mundo, no busquen más, esta es la opción ganadora. ¡Una muestra más de que, si fuéramos “más animalitos” entre nosotros, el mundo estaría mejor! [i]


DESARROLLADO POR: Pastagames
DISTRIBUIDO POR: Devolver Digital
GÉNERO: Plataformas
DISPONIBLE EN: PC, PS5, Xbox Series X|S, Nintendo Switch.

QUÉ ONDA: Un juego de plataformas, pero buena onda
LO BUENO: Adorable por donde se lo mire. Es fácil de entender y muy divertido. El cooperativo funciona tanto con amigos como con desconocidos. Gran cantidad y variedad de niveles muy ingeniosos.
LO MALO: Desbloquear todos los personajes lleva una vida. No se puede jugar offline, requiere conexión constante.

Este análisis de KarmaZoo fue realizado a través de un código de PC provisto por sus desarrolladores.

  • CALIFICACIÓN80%
80%

Escribe un comentario