KIDS [REVIEW]

¿Pueden las decisiones grupales conducirnos al abismo?

Cuando hablamos de arte con mayúsculas —NdE: podrías haber escrito ARTE y ya— en los fichines, enseguida pensamos en las exposiciones Game On! El arte en juego que desde hace 10 años nos asombran con sus excelentes propuestas, desconocidas para la gran mayoría acostumbrada a los tiros, líos y coshas goldas. Por eso es raro ver que alguno se “cuele” en Steam o Google Play Store, como es el caso de KIDS.

KIDS es, primero, un videojuego diseñado por Michael Frei, artista y director de poco más de 30 años, y programado por Mario von Rickenbach, diseñador y creativo tecnológico, responsable también de Krautscape —NdE: ¿ese no lo habías pedido para review…? ¡Chop, chop!—, ambos suizos y multi galardonados, responsables también de Plug & Play (Etter Studio, 2015), disponible en PC y celulares.

Pero también es una película —un corto de 9 minutos— estrenada en la Berlinale en febrero de este año y una instalación —dividida en tres partes con escenarios interactivos, unos 50 muñecos y un video sobre el proceso de producción— presentada en el Museum of Digital Arts (MuDA) de Zúrich, Suiza en febrero del año pasado.

En definitiva, ¿qué es KIDS?

Si “jugaron” Plug & Play, entonces ya deberían tener una idea. El gameplay se reduce a tocar la pantalla, con uno o varios dedos —en el caso de la PC, utilizamos el mouse—. Ni más ni menos que eso. Se nos presentan 34 secuencias que tienen un hilo conductor: muchos muñequitos sin rasgos que permitan identificarlos unívocamente, un pozo ciego y tubos —¿digestivos?—.

Todo es blanco y negro, como en Plug & Play, sin embargo, el dibujo y la animación tienen una fluidez y gracia muy superiores a las de este, que utilizaba trazos a mano alzada. Los efectos de sonido, música incidental y voces en inglés —con subtítulos en castellano— acompañan correctamente la experiencia.

En KIDS controlamos grupos de muñecos. Incidimos en sus decisiones, ya sean correctas o no: Los obligamos a arrojarse al abismo en masa, lo mismo que intentamos que no queden afuera de la ola. Situaciones que sirven de disparadores emocionales: ¿Somos realmente individuos que decidimos por nosotros mismos o formamos parte de grupos que son influidos por estímulos externos para actuar de una determinada manera? ¡Uf!

¡Qué pregunta! Y surgen muchas más… pero hacerlas, depende de cada uno. No son más de 20 minutos de “juego” que garantizan, como cualquier otra expresión artística, horas de interrogantes para los cuales puede no haber una respuesta correcta. Es más, en realidad, lo importante no es la respuesta en sí, sino poder cuestionarnos —como miembros de esta sociedad— por qué siempre terminamos adentro del pozo. [i]

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DESARROLLADO POR: Playables
DISTRIBUIDO POR: Double Fine Presents
GÉNERO: Juego de masas
DISPONIBLE EN: Windows, Mac, Linux, iOS, Android

QUÉ ONDA: 20 minutos para preguntarnos por qué siempre terminamos todos en el pozo.
LO BUENO: Animación fluida. Nos deja pensando. Es compatible con la Biblioteca familiar de Google Play Store.
LO MALO: Interacción muy simple. No dura más de 20 minutos.

Este análisis fue realizado a través de un código de Android provisto por sus desarrolladores.